Junto con el Big Ben o el Puente de la Torre, hay pocas cosas más típicas de Londres y del Reino Unido que los guardias reales, ataviados con sus chaquetas rojas y sus gorros de pelo de oso.

Pero estos soldados tienen sus secretos, y uno de ellos no es otro que usan su peculiar tocado para guardar cosas. El Daily Mail recoge los testimonios de dos soldados. Michael Scott y William McLean, que lucieron el famoso bearskin, y contaron qué metían en él.

Scott reveló: "Cuando están en la Guardia del rey en el Palacio de St James, dos oficiales de los tres de servicio pueden nadar en la piscina cubierta del Royal Automobile Club en Pall Mall".

'Para ir allí deben estar debidamente vestidos con piel de oso, túnica y espada. Pero, obviamente, no me permiten llevar una mochila", prosigue Scott. Así que la solución está clara: llevar el bañador en en el gorro.

Un susto de muerte

Por su parte, McLean recordó una anécdota cuando estaba haciendo su primera guardia en la Torre de Londres y estaba realizando su recorrido por los centinelas en las primeras horas de la mañana.

"Había un silencio inquietante, la niebla se arremolinaba desde el Támesis a través de la Puerta de los Traidores; me venían a la mente visiones de cadáveres decapitados apareciendo detrás de una torre", dice.

Ansioso por "probar su estabilidad", dijo, un compañero oficial escondió un pequeño despertador en su piel de oso y mientras caminaba por la Puerta de los Traidores la alarma sonó, dándole un susto de muerte.

Oposición de los ecologistas

Curiosamente, este tradicional atuendo tiene sus detractores: los ecologistas de PETA, que llevan años denunciando el exterminio de osos negros del Canadá para fabricar los gorros.

El Ministerio de Defensa se comprometió a eliminar las pieles una vez que se encontrara una alternativa, pero recientemente dijo que "ninguna piel sintética cumple con los estándares para proporcionar un reemplazo eficaz".

Sin embargo, PETA dice que han trabajado con el peletero sintético de lujo ECOPEL para desarrollar un material adecuado que sea impermeable e imite la piel de oso real tanto en apariencia como en rendimiento.

Pero el gobierno no cede y dice que "las pieles utilizadas por el Ministerio de Defensa sólo se obtienen a través de proveedores canadienses locales con una acreditación 'Furmark'".

"Se trata de un sistema global de certificación y trazabilidad para pieles naturales que garantiza el bienestar animal y los estándares medioambientales y, a su vez, garantiza el abastecimiento ético y la sostenibilidad de las pieles", sostienen.