Madrid es una ciudad que ofrece muchos atractivos para los amantes de la historia, la cultura y el arte. Entre sus monumentos más emblemáticos se encuentra el puente de Segovia, el más antiguo de la capital y uno de los testimonios de la época en que Felipe II trasladó la corte a esta villa.
¿Qué tiene de especial el puente de Segovia?
El puente de Segovia se sitúa sobre el río Manzanares, en el cruce de la calle de Segovia con el Paseo de Extremadura. Fue construido entre 1574 y 1584 por orden del rey Felipe II, quien encargó el proyecto al arquitecto Juan de Herrera, el mismo que diseñó el monasterio de El Escorial.
El puente tiene un estilo renacentista, con nueve arcos de medio punto de diferentes tamaños, siendo el central el más grande. Los pilares que sostienen los arcos están rematados por unos elementos cónicos llamados tajamares, que sirven para desviar el agua del río y evitar su erosión.
El puente está hecho con sillares almohadillados de granito y tiene una longitud de 172 metros. Su anchura actual es de 31 metros, aunque originalmente era de 8.65 metros. Esto se debe a que el puente sufrió varias modificaciones a lo largo de su historia, especialmente durante la Guerra Civil, cuando fue volado por las tropas republicanas para impedir el avance de las franquistas. En su reconstrucción se amplió el tablero y se abrió el puente en dos partes.
El puente de Segovia fue declarado Bien de Interés Cultural en 1996 y es uno de los símbolos de Madrid.
¿Qué se puede hacer en los alrededores del puente?
El entorno del puente ha cambiado mucho en los últimos años, gracias al proyecto Madrid Río, que ha transformado la ribera del Manzanares en un gran espacio verde y lúdico. A ambos lados del puente se han creado dos estanques artificiales que se comunican entre sí bajo las aguas del río. En uno de ellos hay una fuente con 16 chorros que varían su altura, y en el otro hay un jardín fluvial con una isla donde crecen lirios acuáticos.
Además, se han instalado paseos peatonales y ciclistas, zonas de juegos infantiles, áreas deportivas y culturales, y se han recuperado algunos edificios históricos como la ermita de la Virgen del Puerto o el Matadero. Todo ello hace que el puente sea un lugar ideal para pasear, relajarse y disfrutar del aire libre.
Comentarios
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que 20minutos.es restringirá la posibilidad de dejar comentarios