Danielle Allen, una profesora de primaria de Texas, Estados Unidos, fue despedida por el Distrito Escolar Independiente de Mesquite, ubicado en el condado de Dallas, tras verter continuos mensajes "racistas" a través de sus redes sociales.

Para ello, esta mujer afroamericana decidió adoptar un pseudónimo, Claire Kyle G, a partir del cual podía expresarse libremente en su cuenta de Twitter -ahora llamado X-. Allí, publicó algunas polémicas manifestaciones como el rechazo a que su hermana estuviera saliendo con un hombre blanco. 

Después de recibir un aluvión de críticas por parte de varios usuarios de la red social de Elon Musk, quienes la acusaban de "racista", hubo varios internautas que trataron de indagar en su vida con el objetivo de averiguar quién se escondía tras esa identidad virtual. 

Finalmente, lograron dar con el verdadero nombre de Claire, Danielle Allen, así como algunos datos de su vida. Entre otras cosas, descubrieron que se trataba de una mujer afroamericana que impartía clase en la escuela primaria de Thompson a niños de entre 8 y 9 años. 

El siguiente paso que dieron fue informar a este centro educativo de los mensajes racistas que este miembro de su profesorado, el cual se definía a sí misma como "supremacista negra", había compartido a través de sus redes sociales. 

Cuando Danielle averiguó que estos internautas le habían reportado, lejos de retractarse, se mostró arrogante en su cuenta de X, asegurando que su trabajo estaba completamente a salvo, pues desde su centro sabían que "era todo una broma". "¡Disfruto siendo racista! Nunca voy a cambiar", escribía. 

En otros posts, además, esta usuaria justificaba su comportamiento a sus detractores, alegando lo siguiente: "No tengo ningún problema con las personas blancas, simplemente no me gustan". Asimismo, añadía que "en la vida real" ella respeta a las personas blancas. 

A los pocos días, sin embargo, se comprobó que estaba muy equivocada con su predicción laboral. Y es que, el Distrito Escolar Independiente de Mesquite emitió un comunicado en el que anunciaba su despido inmediato, sin posibilidad de readmisión, y condenaba estos ofensivos mensajes. 

Tras este contundente comunicado, la cuenta de Claire Kyle fue suspendida, tanto en Twitter como en Instagram, si bien se desconoce quién tomó tal decisión, si las redes sociales tras los numerosos reportes, o la propia propietaria de la cuenta.