Cuando se habla de los viajes en avión, la higiene no suele ser lo primero en lo que uno pensaría. Por ello, una asistenta de vuelo ha contado todos los secretos y trucos a tener en cuenta antes de embarcar.

Lo primero que ha contado es la importancia de evitar dormir apoyados en la ventanilla. Y es que este tipo de lugares son focos de gérmenes. Sin embargo, no todos los lugares llenos de suciedad pueden evitarse con tanta facilidad, como el servicio.

"El peor momento para ir al baño es justo antes del despegue y al final del vuelo, sobre todo si es de larga distancia", ha asegurado una azafata. Y es que estos momentos son cuando más se utiliza el retrete y, por ello, cuando más sucio está.  Del mismo modo, también ha aconsejado evitar ir al baño cuando el avión termina de sufrir turbulencias. 

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Por otro lado, el mejor momento para acudir es antes de que sirvan la comida. Y es que, como ha asegurado un antiguo tripulante de cabina:"La comida del avión no es nutritiva. Puede ser aceitosa y rica en sal y grasa; cosas que no suelen ser buenas para la salud intestinal o el tránsito intestinal". 

Además, ha asegurado que, de ser posible, lo más recomendable es evitar ir al baño: "Una parte importante del sector de las aerolíneas es la rotación de personal. Esto a veces significa que no siempre es posible realizar una limpieza a fondo de los aseos del avión por falta de tiempo y prioridades más altas".

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Finalmente, ha querido dar un consejo para cuando no se pueda evitar acudir al aseo. La azafata ha recomendado a todos los que vayan a realizar viajes largos que lleven una mascarilla: "El aseo de un avión es básicamente un armario, sin aire limpio. No hay ventana y la ventilación es escasa".