"El amor es eterno", esto es lo que tuvo que pensar Sarah Button, una estudiante de derecho de 23 años que decidió embarcarse en un vuelo en los Emiratos Árabes Unidos mientras llevaba las cenizas de su novio dentro de un plug anal que ella misma llevaba puesto.

La joven decidió contar su aventura a través de su cuenta de TikTok: "Nos llevaron a mí y a mi amiga a un lado sin darnos muchas explicaciones", aseguró la joven. La estudiante se vio obligada a llamar a su padre para pedir ayuda a la embajada australiana.

El vídeo ya cuenta con más de seis millones de visualizaciones. Al ver la fama que ha obtenido gracias a este ha confesado que se el juguete se trataba de uno de los últimos regalos de broma que su novio le hizo antes de morir. "La intención era inicialmente una broma porque él había pasado mucho tiempo allí y era su lugar favorito. Sinceramente, es lo más divertido que ha hecho, me pasaré toda la vida riéndome de ello, lo que realmente es mejor que llorar".

La broma no fue tan divertida para los agentes de seguridad del aeropuerto, que habían asumido que el objeto se trataba de un arma: "También me gusta poder llevarlo conmigo a lugares a los que sólo habíamos soñado ir". El juguete tiene grabado la palabra inglesa forever que significa para siempre.

La extraña situación casi acaba entre rejas: "Una hora después vino un gran funcionario y nos hizo firmar un documento extranjero súper largo y nos dijo que si salíamos de las puertas del aeropuerto iríamos a la cárcel". Finalmente las dejaron libres tanto a ella como a su amiga. Sin embargo, no se sabe qué ocurrió con el juguete.