El pollo frito es todo un manjar para los amantes de la carne, los cubos de estas piezas son algo muy típico de numerosos restaurantes y cadenas de comida rápida. Sin embargo, hay un hombre que aseguró sentir asco cuando vio que una de sus piezas tenía, bajo el rebozado, otra parte menos frecuente del pollo.

Según informa North Wales Live, el cliente, que prefirió mantenerse en el anonimato, fue al restaurante East Eat de Colwyn Bay (Gales, Reino Unido) y pidió un plato de pollo frito, pero rápidamente dejó de comer cuando se metió en la boca algo que no esperaba.

"Al principio ni siquiera me di cuenta, saqué el primer trozo de pollo y le di un mordisco", comenzó a relatar. "A continuación, miré la comida y vi la extraña forma del trozo, lo que me hizo sacar lo que tenía en la boca con incredulidad".

Al parecer, en su plato incluyeron una pata de pollo rebozada, un ingrediente que se suele comer en muchos países del mundo, pero que no se incluye dentro de las piezas de pollo fritas.

"Como cualquiera puede imaginar, ver lo que tenía en la mano me hizo dejar el resto de la comida", opinó el hombre. "No pude seguir comiendo, me sentí físicamente mal".

Además, el cliente aseguró que llamó al restaurante y, tras quejarse, le colgaron: "Después de intentar explicarles lo que me habían servido, simplemente se callaron, se rieron y, segundos después, la línea se cortó".