Una joven y su novio estaban haciendo buceo cuando ella se encontró de frente con una cría de ballena. El bonito encuentro casi termina en tragedia, pues cuando el animal decidió marcharse estuvo a punto de embestir a la chica.

Este es el momento exacto en el que un buceador tuvo un encuentro y casi chocó con una ballena bebé. Mitch Brown, de 27 años, y su novia Yanna Xian, de 24, estaban nadando en una excursión en barco con ballenas cuando se les acercó una cría de ballena jorobada

La curiosa cría de dos semanas nadó hasta acercarse a Yanna antes de bajar al mar. Pero debido a su enorme tamaño y al movimiento del agua, estuvo a punto de arrastrarla con ella, obligándola a nadar frenéticamente hacia arriba para no descender.

Mitch, de Honolulu, Hawaii, Estados Unidos, lo comentaba a SWNS: "Las ballenas habían estado casi tan cerca de nosotros antes, pero siempre tenían un claro sentido de la dirección que las dejaba lejos de nosotros".

El increíble momento que vivió una pareja al encontrarse con tres ballenas mientras buceaban

"Es posible que esta no haya visto a Yanna y por eso levantó la cabeza antes de tocarla. Mientras se alejaba nadando, me di cuenta de que acabábamos de crear un recuerdo muy importante, se sintió como una verdadera conexión entre el ser humano y la ballena", continuaba relatando el joven.

La pareja contrató una excursión de avistamiento de ballenas con Moorea Blue Water el último día de su viaje a Moorea (Tahití) el pasado mes de septiembre. De vez en cuando, el barco se detenía y podían meterse en el agua para ver las ballenas en su hábitat natural.

El fotógrafo, Mitch, dijo: "Sabíamos que Tahití era un destino para nadar con ballenas. Estábamos nadando en la parte superior del agua porque vimos a una mamá ballena y a la cría descansando en el fondo del océano".

Mientras los observaban tranquilamente desde la parte superior del agua, esta curiosa cría de ballena decidió acercarse: "Fue una hermosa muestra de respeto por parte de ambos. La ballena claramente no quería chocar con Yanna, quien trató de nadar hacia atrás con sus manos, en lugar de sus pies, para evitar patear a la ballena".

"Me preocupaba más que la ballena golpeara involuntariamente a Yanna, y sucedió tan rápido que, para cuando pude reaccionar, la ballena estaba cambiando de rumbo. Después nadamos hacia los demás y nos enseñamos los vídeos y fotos, nos reímos y chocamos los cinco", concluía Mitch.

Yanna no tocó a la ballena, pero la experiencia le causó una gran impresión, algo que llegaron a confirmar: "No podía creer que acabara de interactuar con la cría de ballena de cerca".