La celebración de una velada de la UFC en Melbourne ya viene marcada por la polémica. La alcaldesa de la ciudad australiana ha prohibido la presencia de las azafatas de la competición, las conocidas como 'Octagon Girls', cuya función es ir llevando los carteles entre los asaltos y los combates.

Sally Capp ha calificado la presencia de esas mujeres de tradición "sexista y antigua". "¿En 2019 todavía necesitamos mujeres con poca ropa deambulando en medio de un ring entre asaltos? Las chicas de la parrilla ya no son parte de la Fórmula 1, las azafatas ya no son parte de las competiciones de dardos profesionales... Es hora de avanzar", argumentó.

La respuesta de Dana White, presidente de la UFC, no se ha hecho esperar. El dirigente de la empresa organizadora de las competiciones más importantes de artes marciales mixtas asegura que las Octagon Girls son parte inseparable de su espectáculo.

"Son tan parte de la marca UFC como cualquier otra persona, son embajadoras de nuestro deporte. Nadie trata a las mujeres mejor que nosotros", afirma. "Sugeriría que estas personas que les piden que sean prohibidas echen un vistazo a lo que hacen estas chicas con la compañía, la cantidad de dinero que ganan", argumenta el empresario.