El cambio de entrenador de Garbiñe Muguruza no acaba de dar el resultado esperado. Tras romper con Sam Sumyk después de Wimbledon, pretendía mejorar su rendimiento en el siguiente Grand Slam, el US Open, pero como le ocurrió en Londres ha salido humillada en primera ronda.
Su verduga ha sido la estadounidense Alison Riske. La pista de Nueva York ha vivido un contundente 2-6, 6-1 y 6-3 en el que Muguruza se ha dejado todo en un primer set razonablemente bueno y que acabó casi pidiendo la hora para que finalizase el choque.
A la tenista local le costó poco aprovechar la desconexión de Muguruza, que empieza a ser una pésima seña de identidad, tras imponerse con solvencia en el primer juego. La fortaleza de Riske, actual número 36 del mundo, se mostró no sólo en un segundo set en el que arrasó a la española, sino sobre todo en el tercero que cerró con la primera bola de partido que tuvo.
Con este resultado, Muguruza confirma su pésimo balance en los cuatro Grand Slam de 2019: eliminada en cuarta ronda del Open de Australia y Roland Garros, y en primera de Wimbledon y del US Open.
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