España y Bosnia (1-0) aburrieron en el Estadio de Gran Canaria sólo unas horas después de que la Selección de Luis Enrique quedara fuera de la UEFA Nations League con la victoria de Inglaterra ante Croacia. Fue un partido pocas ocasiones y escaso fútbol que salvó el debutante Brais Méndez con un gol a diez minutos del final.

Se enfundó la camiseta roja por primera vez Mario Hermoso, que formó en el once titular, además del propio Brais Méndez, de Pablo Fornals y de Pau López, que tuvieron minutos en la segunda parte. El entrenador aprovechó para introducir nueve cambios respecto al once que perdió en Zagreb, del que sólo repitieron Isco y Ceballos.

Aunque Bosnia amenazó a los pocos segundos, sólo fue un espejismo. Kepa no tuvo problemas para atrapar y poco más les iban a exigir a él y a Pau López en los 89 minutos siguientes, por no decir nada. Tampoco Sehic, el portero bosnio, tuvo que exhibirse. Como era previsible, España tuvo la posesión, a veces de forma abrumadora. Sin embargo, casi nunca supo qué hacer con el balón para generar peligro.

En la primera parte, casi todos los intentos al llegar al área bosnia fueron disparos desde la frontal, y además sin excesivo peligro. Luis Enrique dispuso dos laterales con tendencia a subir, como Jonny y Gayà, y un centro del campo muy ofensivo, con Suso como interior.

En punta formó Morata, que sigue ofuscado. Ha pasado un año y una semana ya desde su último gol con la Selección. En la segunda parte vio la tarjeta amarilla por llegar tarde y mal a una disputa de balón y falló un gol cantado, de esos que es más fácil mandar a la red que a cualquier otro sitio. Tras un disparo de Asensio que desvió Sehic, Morata chutó con una pierna y despejó con la otra.

La mejor ocasión de Bosnia fue una llegada por la derecha de Visca, que centró al área y no llegó por poco Krunic. También poca cosa. Después llegó el carrusel de cambios y debuts, incluido el de Brais. En el 79, Isco cazó un balón junto a la corona del área, recortó y sacó un disparo lejano que Sehic sacó como pudo. El rechace, esta vez sí, lo mandó a la red Brais Méndez.