Tom Dumoulin sufrió una aparatosa caída en la cuarta etapa del Giro de Italia que puso en duda su continuidad en la carrera. El percance le ocasionó numerosos golpes, aunque tranquilizó a sus seguidores al asegurar que no había sufrido fracturas.

Eso sí, una herida en la rodilla izquierda focalizó la preocupación del Team Sunweb, que confió en la recuperación del ciclista de 28 años e incluso anunció que estaría en la línea de salida de la quinta etapa.

“Ha sido autorizado por los médicos del equipo para correr, pero sigue sufriendo de la rodilla. Tratará de hacerlo lo mejor que pueda y ver qué le depara el día””, aseguró el equipo en sus redes sociales.

Dumoulin partía como uno de los favoritos al triunfo final en el Giro, prueba que ya ganó en 2017, pero no pudo superar las secuelas de la caída y abandonó al poco de comenzar a rodar.

Quien no tomó la salida en Frascati fue el corredor del Bahrain-Merida Kristijan Koren, quien fue suspendido provisionalmente por la UCI por su implicación en una operación antidopaje.

Las infracciones que le relacionan con la Operación Aderlass desarrollada en Austria y Alemania son violar el código antidopaje y datan de 2012 y 2013, cuando el ciclista de 32 años corría en el Liquigas Cannondale.

Por tanto, el esloveno se ha visto obligado a abandonar la ronda italiana, debilitando a su equipo en el camino de Vincenzo Nibali hacia su tercera maglia rosa.

Las sanciones anunciadas por el máximo organismo del ciclismo mundial se extienden al croata Krisjtian Durasek, ciclista del UAE, al esloveno Borut Bozic, director del Bahrain-Merida y al excorredor Alessandro Petacchi, por el consumo de sustancias prohibidas en las mismas fechas que Koren.