El Gran Premio de Francia de Fórmula 1 no será recordado por su emoción. Lewis Hamilton era el gran candidato a repetir victoria para las flechas plateadas en el sinuoso mar de curvas, y cumplió de principio a fin, con Valtteri Bottas segundo y Charles Leclerc tercero. Igual que habían empezado, pese a que en los últimos giros el desfallecimiento de los neumáticos del de Mercedes puso en peligro su segundo puesto.

La pelea por el cuarto puesto se resolvió también pronto, ya que Max Verstappen ni siquiera pudo pelear por el podio ni tuvo que temer las arremetidas de Sebastian Vettel. El alemán sólo pudo adelantar a los McLaren en pista, y acabó 5º pero con la vuelta rápida, conseguida sólo por 2 centésimas sobre Hamilton.

Los McLaren, después de una memorable clasificación, consiguieron una gran sexta posición de Carlos Sainz 6º. El madrileño pasó a Lando Norris en la salida, y acabó resistiéndole durante toda la prueba, hasta que el británico tuvo un problema hidráulico y se hundió a dos vueltas para el final.

Acabó 10º, pero su manera de bregar con los problemas le permitió ser nombrado piloto del día por la afición. No fue una carrera nada fácil para Norris, pero acabó detrás de un Sainz que consumó un gran resultado.

Prueba de que la carrera fue más que cómoda es que acabaron doblados todos del 6º, que fue Sainz, para atrás.