Se acabó el sueño de la Champions para el Atlético de Madrid. Los rojiblancos pusieron rumbo a Dortmund con 2-1 a favor y pudiendo haber sentenciado la eliminatoria en el duelo del Metropolitano. Sin embargo, todo se echó por la borda en casa del Borussia.
Aunque el encuentro acabó 4-2 a favor de los locales, en el minuto 4 Álvaro Morata gozó de la oportunidad más clara para el Atlético de Madrid, pero inexplicablemente mandó el balón fuera cuando todos los aficionados rojiblancos ya cantaban el gol.
El delantero madrileño lideró un contraataque colchonero hasta ponerse en campo contrario y galopar hasta la portería de Kobel, tan solo perseguido por Sabitzer. Morata lo tenía todo para marcar, el único impedimento que tenía era el guardameta.
El 19 rojiblanco decidió hacer una vaselina con la zurda y el balón terminó marchándose desviado muy cerca del poste izquierdo. Su cara lo decía todo, pero la de Diego Simeone en el banquillo aún más.
El increíble fallo de Álvaro Morata terminó siendo trascendental para el devenir del Atlético de Madrid. Podía haber sido el gol de la sentencia, pero finalmente los rojiblancos se acodaron de ese error a la conclusión del partido, después de quedar eliminados por un resultado global de 5-4.
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