El Comité de Antiviolencia ha propuesto este miércoles una multa de 6.000 euros al joven aficionado que metió un dedo en el ano de Lucas Ocampos durante el Rayo Vallecano - Sevilla de Liga, así como la prohibición de acceso a los recintos deportivos durante 12 meses. Una sanción que despierta un interrogante: al ser menor de edad, ¿quién debe hacerse cargo del pago de la sanción económica?
Según la Ley Orgánica 5/2000, de 12 de enero, reguladora de la responsabilidad penal de los menores, "cuando el responsable de los hechos cometidos sea un menor de 18 años, responderán solidariamente con él de los daños y perjuicios causados sus padres, tutores, acogedores y guardadores legales o de hecho, por este orden".
Dicha legislación, además, establece en este sentido que cuando los padres "no hubieren favorecido la conducta del menor con dolo o negligencia grave, su responsabilidad podrá ser moderada por el Juez según los casos".
El comunicado de Antiviolencia
El organismo ha considerado la acción del joven, sentado en primera fila en el estadio de Vallecas, un "grave hecho contra la integridad del futbolista del equipo visitante" que provocó que el duelo se interrumpiese durante varios minutos. Además, ha señalado que, "tras lo ocurrido, el espectador y sus acompañantes mostraron una actitud jocosa y desafiante ante las protestas del jugador".
LaLiga ya confirmó que interpondría una denuncia contra el joven ante la Fiscalía de Menores después del incidente y tras las palabras de Ocampos, que pidió públicamente que se tomasen medidas. "Siempre hay un tonto. Ojalá que no pase más porque si ocurre en el fútbol femenino sabemos lo que puede llegar a pasar. Me contuve porque tengo dos hijas, pero esperemos que la Liga tome represalias", sentenció el futbolista.
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