El exfutbolista italiano Giovanni Padovani ya tiene sentencia por el asesinato de su exnovia, Alessandra Matteuzzi. El tribunal de Bolonia lo ha declarado culpable y ha sido condenado a cadena perpetua por matar a su expareja el 23 de agosto de 2022.
Domenico Pasquariello, juez del caso, no ha tenido dudas y ha tomado su decisión después de dos horas de juicio. En él, Padovani intentó explicar que no estaba cuerdo cuando cometió esos actos.
Lo cierto es que el futbolista, que jugaba en el Sancataldese de la Serie D, dio patadas y puñetazos a Matteuzzi, así como martillazos y golpes con un bate de béisbol. Además, también la hirió con un banco de un jardín cercano hasta matarla.
El tribunal no ha dudado sobre este brutal asesinato y el exfutbolista se somete ahora a una cadena perpetua y a una indemnización a los familiares de la víctima.
Un investigador, clave en el caso
Ya en 2021 un investigador intentó demostrar la obsesión que tenía Padovani. Tras el asesinato de su expareja, este investigador se puso en contacto con la policía para denunciar algunas peticiones "obsesivas" que incluso "rozaban el absurdo".
Señaló que hubo "llamadas telefónicas rápidas e insistentes, incluso de noche, para vigilar a la ex y saber si estaba mintiendo", algo habitual en el futbolista, lo que el detective considera como un comportamiento "excesivo, diría obsesivo".
"Desde el principio me llamó la atención que con mucha insistencia, entre 10 y 15 veces al día, incluso de noche, esperaba tener información en tiempo real sobre los movimientos de Matteuzzi" para tener "confirmación de la información que ella le dio por teléfono", explicó.
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