Fernando Alonso encara este fin de semana la última carrera de la temporada 2023 de Fórmula 1, la que ha sido su vigésima en el 'Gran Circo'. Un Mundial en el que ha seguido estando muy lejos de la lucha por el título, como todo aquel que no se llame Max y se apellide Verstappen, pero en el que ha vuelto a sonreír como hacía una década que no se le veía.
Más incluso, viniendo de donde venía. Aston Martin le brindó el primer coche competitivo desde Ferrari —lo único que él llevaba reclamando años— cuando parecía imposible, cuando parecía que había vuelto a cometer un error eligiendo un nuevo cambio de equipo para irse al que era en 2022 el noveno coche, y a partir de ahí se encargó del resto y comenzó a callar bocas.
Demostró su magia una vez más, justificó los constantes halagos de pilotos y jefes de equipo que le han situado siempre, especialmente en los años más duros, como uno de los mejores de la historia sin discusión, y regresó de manera habitual al podio —hasta en ocho ocasiones a falta de correr en Yas Marina— a pesar de que se escapase la victoria '33' por los pelos. Al menos, sí que logró empatar a 106 podios con Alain Prost en cuarta posición histórica.
Por todo ello y mucho más, por haber reenganchado a toda una generación a la F1, por haber enamorado a los que no pudieron disfrutar de sus mejores años y por haberlo hecho todo con 42 años, el piloto asturiano calificó la temporada como "un 10 sobre 10", porque era "impensable" a principio de año conseguir estar peleando por el cuarto puesto del Mundial de Pilotos y de Constructores.
Un curso "inolvidable" que, para él, está "a la par" de su campaña 2012 a nivel de pilotaje, la que tanto el propio Alonso como sus seguidores consideran su mejor temporada pese a ser sólo subcampeón: "Llego un poco cansado a Abu Dhabi, porque Las Vegas fue exigente a nivel físico. Y con ganas de afrontar esta última carrera, tenemos varios objetivos, sobre todo el Campeonato de Constructores, con McLaren a 12 puntos".
"Aunque necesitaríamos un pequeño milagro, lo vamos a intentar, esa pequeña motivación nos sirve para sacar fuerzas y hacer un fin de semana lo mejor posible", afirmó Alonso sobre el último Gran Premio del año nada más aterrizar en Emiratos Árabes, mucho antes de probar la pista en las primeras sesiones de libres que no le sirvieron para mucho.
El asturiano, que viene de hacer un noveno puesto en la 'Ciudad del Pecado', confesó que la temporada "ha pasado rápido", con un balance "de 10 sobre 10", después de subirse al podio en ocho ocasiones: "Era impensable lo que lo que hemos hecho, parece que se da ya por sentado que vamos a luchar por los puntos, a intentar luchar con McLaren por el cuarto en Constructores o con Sainz, Norris y Leclerc en Pilotos. Nos tomarían por locos".
"Cuando hice el test aquí hace 12 meses, teníamos el objetivo de sumar puntos en algunas carreras, soñar con algún podio si llovía o si había un incidente. Sin embargo, hemos conseguido ocho podios y estamos luchando en la 'Champions' con los mejores equipos. Ha sido un año inolvidable para mí, de los mejores en cuanto a conducción, seguramente parecido al 2012, que lo consideré siempre el mejor año, y este año está a la par, así que no voy a pedir más, 10 sobre 10", insistió el bicampeón del mundo sobre su rendimiento.
Entrando en más detalle, Alonso se atrevió incluso a señalar las cinco carreras que él considera han sido sus mejores a lo largo de un año en el que ha dejado auténticas exhibiciones: Bahréin, Mónaco, Canadá, Monza y Brasil. Su primer podio con Aston Martin, la carrera en la que acarició la '33', la carrera en la que el AMR23 mostró su mejor ritmo y mayor potencial, un noveno puesto que supo a gloria siendo el noveno coche, y la resurrección tras el bajón con la defensa del año ante 'Checo' Pérez. Zandvoort, donde fue segundo, en las menciones honoríficas.
Además, el ovetense afirmó que esta temporada "ha sido importante" para crecer y "para sentar las bases del proyecto de Aston Martin", después de un 2022 en el que "el coche no fue lo esperado", y por ello hizo un llamamiento a la esperanza para 2024: "Tuvimos que construir un coche de cero este año, un proyecto que empezaba este año y yo creo que para el futuro tenemos la base. Así que creo que todo va a ser un poco más fácil de aquí en adelante".
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