Aunque parecía que la dimisión de Luis Rubiales estaba cerca con el anuncio de esa Asamblea Extraordinaria para el viernes, el presidente de la RFEF terminó asegurando en el acto, hasta en cinco ocasiones, que no pretendía dejar el cargo. Por lo tanto, y ante un discurso más que polémico, el Gobierno, a través del CSD, ha decidido denunciarlo ante el Tribunal Administrativo del Deporte (TAD).

De este modo, es el Gobierno quien traslada su propia denuncia, no cualquiera de las tres que Galán, Estrada Fernández y Sumar presentaron al CSD. Así lo ha confirmado el organismo en la mañana de este sábado a través de un comunicado, en el que asegura que Rubiales ha cometido "infracciones muy graves" por "su inaceptable comportamiento durante la final del Campeonato del Mundo femenino de fútbol".

El Consejo Superior de Deportes, Víctor Francos, ha sido el encargado de solicitar al TAD una reunión extraordinaria el próximo lunes para no tener que esperar hasta el jueves, día en el que se celebran las ordinarias del organismo.

El CSD responde a Yolanda Díaz y explica por qué la decisión de apartar a Rubiales no puede hacerse ya

En esa reunión extraordinaria, si se valora que hay una infracción grave de la ley del deporte, se abrirá un expediente y el CSD convocará a su comisión directiva en las siguientes 48 horas. Es en ese momento cuando el Gobierno puede suspender a Rubiales, por lo que el todavía presidente de la RFEF podría dejar de serlo el miércoles.

El Gobierno se acogería al artículo 62.2.c de la Ley del Deporte, que señala que el CSD puede "suspender motivadamente, de forma cautelar, a la presidencia o a los demás miembros de los órganos directivos, cuando se incoe contra estas personas expediente sancionador como consecuencia de presuntas infracciones calificadas como muy graves".

Iker Casillas reacciona a la rueda de prensa de Rubiales con solo dos palabras

El CSD, tal y como explica en su comunicado, ve "una posible vulneración de los artículos 76.1.a de la Ley del Deporte y 14.h del Real Decreto 1591/1992", que hace referencia "a los abusos de autoridad" y "a los actos notorios y públicos que atenten a la dignidad o decoro deportivos" respectivamente.

"Estas son las últimas horas de Rubiales"

El representante del Ejecutivo en funciones para el deporte, Miquel Iceta, ha condenado el discurso de Luis Rubiales, así como la actitud de la gran mayoría de asistentes a la Asamblea Extraordinaria. Y, además, ha asegurado que "el Gobierno está tomando cartas en el asunto y, en utilización de sus atribuciones" ha puesto en marcha un "procedimiento que puede culminar en sanciones excepcionalmente duras". En una entrevista este sábado en El País, Iceta asegura que "en lo que dependa de nosotros, son las últimas horas de Rubiales".

"Esperemos que el procedimiento no se alargue y que la ciudadanía pueda estar tranquila en el sentido de que vive en un país en el que se respetan los derechos y las libertades y en el que la bandera de la igualdad entre hombres y mujeres no se arría ningún día", ha finalizado.