Toni Nadal confiesa la dureza de la preparación en los primeros años de Rafa: "Nunca una excusa nos hizo ganar un partido"

Toni Nadal confesó este miércoles la dureza de la preparación de su sobrino Rafa Nadal en sus primeros años de carrera, momento en el que consiguió convertir su exigencia en la autoexigencia del ahora ganador de 22 Grand Slams, del que asegura "buscó muy pocas excusas" en su camino a lo más alto.

El entrenador habló de ello en una intervención en el marco del Open de tenis de Segovia, en el que Rafa Nadal se impuso hace veinte años, en el que también afirmó que los "mejores años de entrenamiento" a su sobrino fueron esos años de preparación, entre ellos el del referido torneo segoviano.

En una conversación en torno a "Todo se puede entrenar", que da título a su último libro, quien fuera entrenador de Nadal hasta 2017 habló sobre el éxito del deporte del tenis, la superación y el trabajo que durante años realizó con su sobrino y el panorama actual del deporte. Incidió en la exigencia que le imprimió a su sobrino durante todos los años de entrenamiento, a quien desde chico vio como "un joven con mucho talento".

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A su juicio, lo más importante en un deportista es la preparación, y recordó que ha vivido muchos momentos muy importantes entrenando a Rafael Nadal, pero para él "ningún momento fue tan especial como los años" que pasaron "ilusionados con que mejoraríamos en todos los aspectos".

Dentro de su etapa como entrenador de Rafa y en esos primeros años, desveló que fue un entrenador "muy exigente" y e hizo hincapié en que para conseguir el éxito en el deporte se debe diferenciar el esfuerzo de la exigencia. "Para cualquier deportista debe primar la exigencia, el buscar la manera de mejorar", planteó.

Nunca una excusa nos hizo ganar un partido

En cuanto al papel de la mentalidad en el deporte, afirmó que en la actualidad hay una "menor capacidad mental en los jugadores" que la que había antes. Y sobre los problemas de salud mental, opinó que aunque "es verdad que en la actualidad hay gente que tienen dificultades, también hay exageraciones", y abogó por no tirar la toalla tan rápido y "seguir luchando si las cosas no van tan bien".

En el éxito de Rafael Nadal, valoró "el apoyo por el trabajo" y el cambiar la exigencia que proponía a su sobrino por la "autoexigencia que él debía imponerse". Además, resaltó la necesidad de no poner excusas en el deporte. "Mi sobrino buscó muy pocas excusas" y "nunca una excusa nos hizo ganar un partido", sentenció.