Fernando Alonso tiene un bonito reto por delante este fin de semana en el GP de Hungría, un trazado especial donde cerrar un círculo. En él brilló con luz propia por primera vez en 2003 con su primera victoria en el 'Gran Circo', un triunfo que, tal como ha confesado en la previa, "lo cambió todo", y que ahora buscará replicar para lograr la consecución de la ansiada '33'.

"Me acuerdo, fue un momento mágico de mi vida y de mi carrera, y algo que lo cambió todo. Además, pensaba que iba a hacer un top 5 como mucho y ganar fue una gran sorpresa", declaró en la rueda de prensa oficial antes de entrar en detalles sobre todo lo que llegó después de ser el primero en cruzar la bandera a cuadros.

"Cambió muchas cosas en mi vida, en España, también perdí mi privacidad ... La primera victoria es grande para todos, y para mí también un gran cambio", explicó sobre un momento muy positivo con algunos matices negativos del que "no cambiaría nada".

Alonso regresa a la tierra prometida de Hungría para cerrar el círculo

El asturiano tiene desde entonces una relación especial con el circuito de Hungaroring, por lo que, como él mismo indicó, "es increíble que solo tenga una victoria" en él. Los problemas mecánicos y las decisiones de equipo le arrebataron dos victorias prácticamente hechas en 2006 y 2007, y nunca más ha estado cerca de lograrla con el resto de movimientos -la mayoría desacertados- que ha protagonizado en la parrilla.