El ciclista suizo Gino Mäder murió durante la mañana de este viernes, después de haber sufrido un brutal caída por un barranco durante la quinta etapa de la Vuelta a Suiza y haber tenido que ser reanimado antes de ser trasladado en helicóptero.

Corría el deportista el kilómetro 197 de la prueba, pasando por el descenso de Albulapass, cuando chocó con otro corredor, Magnus Sheffield (Ineos Grenadiers), a gran velocidad. Fue entonces cuando el ciclista de Bahrain Victorious se salió de la carretera y cayó por un barranco.

El personal médico de la etapa se trasladó al lugar dos minutos después y tuvo que reanimar a Mäder, que permanecía inconsciente sobre el agua, antes de que fuese trasladado en helicóptero al hospital de Chur. "La severidad de sus lesiones aún no ha sido clarificada", señalaba en un comunicado la organización de la carrera.

Sheffield, por su parte, también fue atendido en el punto en el que tuvo lugar el accidente y conducido posteriormente al hospital de Samedan con moratones y una conmoción.

El mundo del ciclismo se volcó durante toda la tarde con el suizo. "Fuerza Gino", "estamos contigo Gino" o "todo nuestro apoyo y los mejores deseos a Gino", fueron algunos de los mensajes que los distintos equipos de la etapa compartieron por el deportista.

También se pronunció Remco Evenepoel, principal favorito para la conquista de la general (segundo en la clasificación), que se mostró muy crítico con el recorrido de la prueba. "Deseo que todos los implicados en el choque de hoy estén bien. Espero que el final de la etapa de hoy haga pensar a los organizadores de las pruebas y a nosotros mismos como corredores", apuntó.

"Un final en alto podía haber sido perfectamente posible, no fue una buena decisión hacernos acabar tras un peligroso descenso. Como ciclistas, debemos pensando en los riesgos que tomamos al bajar las montañas", añadió el belga.