El fútbol vuelve a vivir un episodio lamentable de violencia. Después del encuentro entre el juvenil del Ceuta y el Calavera de Sevilla, un árbitro fue duramente agredido y tuvo que acudir a un centro hospitalario para ser atendido de las heridas y contusiones que había sufrido durante este ataque.

Antonio Pozo arbitró el encuentro entre CD Polillas y Calavera, dos equipos de División de Honor Juvenil en el José Benoliel de Ceuta. Una vez finalizados los noventa minutos, el colegiado viviría un fatal desencuentro al salir del estadio.

Cuando Pozo marchaba hacia su domicilio sufrió una brutal agresión por parte de un grupo de aficionados. Este hecho desencadenó un aluvión de críticas sobre lo ocurrido y la rápida intervención de los entes implicados en nuestro fútbol. La Real Federación de Fútbol de Ceuta confirmó el incidente y denunció todo lo sucedido a través de un comunicado: "El árbitro ceutí fue acorralado por varias personas, tirándolo al suelo y siendo golpeado repetidas veces, causándole diversas heridas y magulladuras", sentenció el comunicado de la Federación ceutí.

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El ente federativo también confirmó que Antonio tuvo que acudir a un centro sanitario tras el grave ataque sufrido: "El colegiado se ha dirigido a un centro médico para ser atendido y, posteriormente, a la Comisaría de la Policía Nacional para interponer una denuncia de lo sucedido, siendo acompañado por el responsable de CTA de fútbol, Mohamed Ahmed ‘Mauco’, por el presidente de la Territorial, Antonio García Gaona, así como por varios compañeros del estamento arbitral", añadió.

La RFEF entra a escena

Por otro lado, la Real Federación Española de Fútbol también condenó este terrible episodio: "La RFEF lamenta y condena la brutal agresión que unos jugadores de categoría juvenil, y el padre de uno de ellos, han propinado al árbitro Antonio Pozo después de un partido disputado en Ceuta. El árbitro violentamente agredido es uno de los colegiados de Tercera División de la RFEF que forma parte del programa de talentos".

Además la RFEF considera que hay un ambiente nocivo en el fútbol durante los últimos meses contra del estamento arbitral que está provocando este tipo de reacciones: "La RFEF ya ha denunciado en las últimas semanas el clima de hostilidad que se estaba generando en contra de los árbitros y advertía de que podría acabar con alguna tragedia como ya ha ocurrido". Todo esto ha provocado que los colegiados valoren la idea de parar LaLiga con una huelga. Durante este martes habrá una reunión definitiva para decidir un posible parón.