Paula Badosa sigue sin ver la luz. La catalana ha sufrido una cruel despedida del Open de Miami tras caer ante ante Elena Rybakina (3-6, 7-5, 6-3), su verdugo en Indian Wells, a pesar de haber estado a punto de llevarse la victoria en el duro choque contra la campeona del torneo californiano.

Pudo llevarse la victoria la tenista española, pues tuvo en su mano un punto de partido para cobrarse la venganza con la kazaja tras llevarse de manera contundente el primer set y tomar ventaja en el segundo, pero no lo aprovechó. 

Ninguna de las dos arrancaron bien el partido, con cuatro roturas en los primeros cuatro juegos, aunque la primera en reponerse fue Badosa, que terminó apuntándose la primera manga para coger confianza. Así arrancó el segundo, en el que se fue hasta el 4-2 ante una aturdida Rybakina, que, sin embargo, consiguió reponerse, eliminar la distancia con su rival y salvar ese decisivo 'match-ball'.

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Ahí ganó la batalla mental la kazaja. "¿Qué hago?", preguntó desesperada la catalana a su cuerpo técnico, con quien siguió intercambiando impresiones tras conceder el segundo set.

Consiguió sobreponerse de nuevo la española, que empezó bien la tercera y última manga, aguantando hasta el séptimo juego, cuando la número 7 del mundo amplió la brecha haciéndose fuerte en su saque para terminar cerrando el partido tras tres horas y media.

La derrota supone un duro varapalo para Badosa, que el año pasado había sido cuartofinalista en Miami, por lo que saldrá del 'top 30' -ocupa actualmente la vigesimonovena plaza- y acabaría en la posición 33 del ránking.