El comienzo de la temporada 2023 de Fórmula 1 ha sido de ensueño para Fernando Alonso, prácticamente inmejorable. Claro está que podría haberse llevado la victoria, la 33, mucho mejor que ese podio inicial como tercer clasificado en Baréin, pero Red Bull es inalcanzable por el momento.
Aun así, su debut con Aston Martin sirvió para muchas cosas: el piloto asturiano recuperó de golpe la moral y la pasión que se habían ido diluyendo tras años y años de fracasos estrepitosos, y sumó su 99º podio; mientras Aston Martin y el AMR23 demostraron ser muy competitivos, que no son flor de un día y que han llegado para crecer y desafiar a los equipos punteros.
En la primera cita del Mundial, en Sakhir, Alonso posicionó al AMR23 como segundo coche más rápido de la parrilla, y ya dejó caer que venían grandes paquetes con mejoras para las siguientes carreras. Aun así, no será de manera inmediata, por lo que Alonso cree que el rendimiento de Aston Martin en las dos próximas pruebas, en las que supuestamente debería sufrir más que en Baréin, demostrará su posición.
El paso al frente de Aston Martin en 2023 es tan evidente como sorprendente, dentro y fuera de la escudería británica. Desde que se presentó en sociedad el AMR23, los de Silverstone han querido ser cautos, prudentes en sus declaraciones y previsiones, pero las sonrisas y gestos de Alonso siempre les han delatado, especialmente después de ese primer fin de semana en el que el ovetense fue tercero y Stroll, recién operado, fue sexto.
Les guste o no, tanto la afición como sus rivales en pista (sobre todo Red Bull y Mercedes) como la propia FIA les ha colocado en la terna de favoritos para ganar carreras e incluso pelear el Mundial. Su coche presenta un concepto completamente novedoso respecto a 2022, y por tanto tiene mucho más margen de mejora que sus competidores, que prefirieron invertir en el concepto de la pasada temporada y mejorarlo.
En cambio, la sensación en Aston Martin es más bien de incredulidad, en el buen sentido, ante los óptimos resultados obtenidos tan temprano en la temporada, como plasma Alonso en sus declaraciones posteriores al GP de Baréin: "Siempre esperas dar un paso atrás y volver a la realidad, pero la situación parece real". Un impulso extraordinario para duplicar el esfuerzo y el trabajo en Aston Martin.
El asturiano sigue abordando el rendimiento del AMR23 y sus posibilidades reales con mucha cautela, sin meterse en charcos que puedan salpicarle, y sin prometer nada más allá de guiños y gestos a sus seguidores. Por eso, explica que su rendimiento en los dos Grandes Premios que siguen a Baréin determinará su verdadera situación:
"Ahora vamos a Jeddah, tengo curiosidad por Arabia Saudí y Australia. Son circuitos muy diferentes, con curvas de alta velocidad y poca degradación. Creo que en Baréin fuimos fuertes en unos aspectos que tal vez no encontremos en Jeddah y Melbourne. Entonces, si somos fuertes en las dos próximas carreras, tendremos un muy buen 2023", ha asegurado el bicampeón del mundo.
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