El Mundial 2023 de Fórmula 1 ha dado comienzo con los primeros entrenamientos libres en el Gran Premio de Baréin, pero no lo hará oficialmente hasta que se dispute la primera carrera de la temporada, el domingo 5 de marzo en el circuito de Sakhir. A partir de ahí, otros 22 Grandes Premios se irán sucediendo a lo largo de 9 meses, hasta que el 'Gran Circo' baje el telón en un trazado ya clásico en los finales de temporada como el de Yas Marina, en Abu Dabi, el día 26 de noviembre.
Será el campeonato más extenso de la Historia con esas 23 carreras, y podría haber llegado a las 24 si el Gran Premio de China no se hubiese caído del calendario oficial debido a las restricciones por COVID que sigue aplicando el país asiático. Finalmente, ni Estambul ni Portimao pujaron por ocupar esa plaza, y esas serán las carreras que compongan el tortuoso camino hacia el título mundial para pilotos y constructores.
Trazados clásicos como Monza (Italia) o Silverstone (Reino Unido) sumarán una temporada más a su impoluto palmarés como las únicas pistas donde se ha corrido en todos y cada uno de los campeonatos mundiales de Fórmula 1, pero no serán los únicos. Spa Francorchamps (Bélgica) y Montecarlo (Mónaco), por ejemplo, también mantienen su plaza y dan ese toque de 'glamour vintage' al calendario, sin olvidarnos por supuesto de España.
El Gran Premio de Cataluña, disputado como ya es costumbre en Montmeló, será objeto de dos novedades importantes. La primera de ellas, que se correrá por primera vez (2-4 junio), en contra de lo que dictaba la tradición, después del Gran Premio de Mónaco (26-28 de mayo); y la segunda, que la chicane del final del circuito, incorporada en 2007, desaparecerá para restaurar el antiguo trazado con las dos últimas curvas a derechas. Curiosamente, el único piloto en activo en disputar esa carrera en ambos casos fue Fernando Alonso, ganador en 2006 en ese último año del recorrido original.
A muchos de los circuitos ya mencionados, especialmente el monegasco, les cuesta cada año un poco más poder hacer frente al exigente canon económico que han de abonar los Grandes Premios organizadores para ser anfitriones de alguna fecha del calendario de la F1. Sin embargo, hay otros, los más modernos, que no lo sufren tanto. De hecho, entrando de lleno en las novedades, hay países que pueden permitirse acoger hasta tres Grandes Premios distintos este año.
Es el caso de Estados Unidos, que contará con la ya habitual carrera en el Circuito de las Américas, en Austin, y con el GP de Miami, incorporado el pasado año. En su afán por expandir el negocio al país norteamericano (entrada de Ford y de Cadillac como fabricantes, llegada de pilotos estadounidenses a la parrilla...), que también tiene de vecino al GP de México, y de maximizar el espectáculo, nada mejor que presentar el primer Gran Premio de Las Vegas, único debut en el calendario de 2023 (18 de noviembre).
Aunque Italia acoge dos, el de la Emilia Romagna y el de Monza, ninguno es novedoso ni regresa este año, como sí lo hace el Gran Premio de Qatar, celebrado en el circuito de Lusail. La Copa del Mundo de la FIFA atrajo toda la atención del país árabe en 2022, hasta el punto de renunciar a su Gran Premio, pero este año vuelven con más fuerza que nunca. A cambio, el que desaparece de nuevo es el Gran Premio de Francia, que dice adiós al Circuito Paul Ricard y a la Fórmula 1 por el momento.
De los 23 Grandes Premios que componen el calendario, nueve se disputarán en Europa, seis en América, siete en Asia y uno en Oceanía, primando además la reducción de desplazamientos innecesarios entre continentes. Uno de los objetivos de la FIA para 2030 son las cero emisiones, y ello implica también ir reduciendo los excesivos, costosos y contaminantes desplazamientos. Una vez empiece la conocida como 'temporada europea', solamente dejarán el carrusel de carreras en el viejo continente para viajar a Canadá, mientras que recorrerán América y Asia/Oceanía en dos etapas diferenciadas.
Será, además, un Mundial sin apenas descansos, en el que las mejoras irán llegando conforme avanza la competición, sin tiempo ni para respirar. Aun así, habrá dos grandes parones para cargar pilas. El primero, generado por la salida de China del calendario, del 2 de abril con el Gran Premio de Australia, al 30 de abril, cuando se dispute el Gran Premio de Azerbaiyán; y el segundo, el clásico parón veraniego, del 30 de julio al 27 de agosto, cuando los pilotos cogerán sus 'mini' vacaciones. Todo lo demás, con alguna semana suelta, será pura competición sobre las cuatro ruedas más veloces del planeta.
El último gran aliciente serán las clasificaciones al sprint que tanto éxito han tenido en años anteriores. Como el ensayo previo salió bien, este año tendremos seis Grandes Premios con este añadido en lugar de los tres habituales, en trazados ya escogidos: Azerbaiyán, Austria, Bélgica, Qatar, Estados Unidos y Brasil. Un calendario que promete emociones fuertes, y que pasará, pase lo que pase, a la Historia de la categoría reina del automovilismo mundial.
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