Marcelinho Huertas, con 40 años, volvió a dar una nueva lección magistral en la dirección de juego con 21 puntos y 10 asistencias durante la final que enfrentó al Unicaja con el Lenovo Tenerife en la final de Copa del Rey (80-83).

El último contraataque de los canarios durante el partido de ayer tenía mucho peligro. Antes del descanso, el Lenovo se puso por delante del marcador, con el triplazo del brasileño, quien inició un contraataque marcando como nunca de forma brillante. 

"Fue un partido complicadísimo, durísimo. Tuvimos que remar desde el principio. Cuando íbamos por detrás, incluso cuando parecía que se nos ponía imposible, tuvimos fe", afirmó el MVP de la semifinal.

Este jugador nos tiene acostumbrados a hacer anotaciones que no son de este mundo, pero ayer, el base internacional dio de nuevo una lección de elegancia, rapidez y precisión al anotar el triple que hacía soñar al conjunto canario con el título de campeones.

Huertas, viste la camiseta aurinegra hasta el final de la temporada 2023-24. Ayer realizó un partido de escándalo que, aunque no sirvió para otorgar la victoria al Lenovo, marcó el terreno para seguir sumando éxitos.