El partido Inglaterra-Austria, que terminó con victoria 1-0 para las británicas y sirvió para inaugurar la Euro 2022, tuvo una asistencia de 68.871 espectadores. Se trata de un nuevo récord de asistencia en una Eurocopa femenina.

La cifra récord de espectadores hasta la fecha databa de la final de la Eurocopa de 2013. Aquel partido entre Alemania y Noruega, disputado en Suecia, acogió a un total de 41.301 espectadores.

El récord es todavía más llamativo al tratarse de un partido correspondiente a la fase de grupos. Hasta ahora, el mayor número de espectadores en este tipo de encuentros se remontaba a 2005, en Manchester, cuando 29.092 espectadores acudieron al Inglaterra-Finlandia (3-2), jugado en 2005, en Manchester.

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Es evidente que estamos ante un gran momento para el fútbol femenino, que ha crecido de forma paulatina hasta explotar recientemente. El número de aficionados y seguidores ha ido a más y actualmente es de mucho apoyo para un fútbol cada vez más global.