Muchas concentraciones de equipos de fútbol acaban, no se sabe muy bien por qué, con jugadores cantando. Bien como pago de una novatada, bien por una celebración, bien por simple aburrimiento, no es raro que porteros, defensas leñeros o delanteros goleadores saquen el artista que llevan dentro.

El estado en el que Higuaín ha vuelto a los entrenamientos con el Inter de Miami: calvo, barbudo, pasado de peso...

El último en hacerlo ha sido Gonzalo Higuaín. El argentino suele hacer mucho vestuario en los equipos donde milita, lo que hace que se lleve bien con sus compañeros mayoritariamente. Para eso hace falta mucho sentido del humor y poco del ridículo, algo que demostró en el comedor junto al resto de componentes del Inter de Miami.

Retado por los demás futbolistas, Higuaín cogió el micrófono para entonar uno de los temas más populares del mundo, que llegó a reventar todos los récords de reproducciones en Youtube: el archiconocido 'Despacito', de Luis Fonsi.

El resultado habla por sí mismo:

Higuaín ha estado en el foco de la crítica de la afición por su estado de forma y su aspecto. Se reincorporó a los entrenamientos del Inter de Miami con un ligero sobrepeso, con una frondosa barba poblando la cara y la cabeza totalmente rapada.

Poco a poco ha ido ganando forma y se ha puesto a trabajar con normalidad a las órdenes de su entrenador, Phil Neville, para preparar la temporada de la MLS que arranca en abril.