Benzema, el despreciado por Francia que decide cuándo, cómo y dónde en el ataque del Real Madrid

Benzema celebra uno de sus goles ante el Celta.
Benzema celebra uno de sus goles ante el Celta.
EFE
Benzema celebra uno de sus goles ante el Celta.

Karim Benzema disputa este año su duodécima temporada como jugador del Real Madrid. Y, pese a los años, la experiencia, los éxitos y fracasos y los numerosos títulos conseguidos en la última década, el francés vive el que es posiblemente su momento más importante como madridista. 

Desde la marcha de Cristiano Ronaldo en 2018, a Benzema se le exigió dar un paso al frente, ocupar el hueco del portugués y liderar el ataque blanco. Romper esa barrera que aún le mantenía en cierta segunda fila y ganarse de una vez el total respeto y reconocimiento. Y lo hizo. Desde el minuto uno, se erigió en director general.

El francés siempre ha competido contra el lastre de no ser un '9' al uso y ha sido objeto de críticas continuas por su presunta baja aportación a la cuota goleadora, pasando por alto la importancia de su gestión del balón, su visión de juego con y sin él en los pies, su técnica, su finura en la forma y su omnipresencia en todo el engranaje de la delantera madridista. Además, desde el adiós de CR7, también ha sabido hacer más goles en momentos clave y no sólo fabricarlos para los demás.

Dos hizo este sábado ante el Celta. Y ya son 17 en Liga, ocho en los últimos seis. Un doblete en Vigo al que sumar una asistencia final a Asensio que pusieron de manifiesto, por enésima vez, las cualidades del '9' blanco para saber cuándo, cómo, hacia dónde y por qué en todo momento del partido.

El madridismo, que siempre fue ganar en primavera, como ya dejó grabado a fuego Manuel Jabois, tiene en el francés a una de sus grandes esperanzas e ilusiones en el tramo final de la temporada. 

Un fuera de serie que, inexplicablemente, no ha recibido el perdón de Didier Deschamps y ha sido condenado al ostracismo de una selección que, aun campeona sin él, no parece darse cuenta de lo que se pierde.

Esa ausencia de gol que se le suele colocar como hándicap tiene a Benzema, por cierto, en el puesto número cinco de máximos goleadores de la historia del club, con 271. Cristiano Ronaldo, Raúl, Di Stefano y Santillana son los únicos que le superan. Simples datos.

KB9 es la esencia del ataque blanco y su entendimiento con Kroos roza lo obsceno cuando se aprecia con detenimiento la finura de ambos. Un superclase 'exiliado' que por fin obtiene el reconocimiento merecido.

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