Una de las claves de la victoria del Real Madrid en el Clásico frente al Barcelona llegó en la jugada que acabó en 1-2. Ramos acabó en el suelo tras un agarrón de Lenglet, y tras revisión del VAR, Munuera Montero decretó que era pena máxima.

El Betis se queja en Twitter por un agarrón como el de Ramos que a ellos no les pitaron

Sergio Ramos, un especialista desde los once metros, no falló, pese a que Neto le adivinó la dirección del disparo. El tanto fue celebrado por el capitán madridista señalándose el dorsal y por miles de aficionados blancos desde sus casas, además de por ser un gol ante el gran rival, por acabar con una vieja reivindicación.

La hinchada merengue había convertido en costumbre recordar en las redes sociales antes de cada partido en el Camp Nou que pitar un penalti se había convertido en un auténtico unicornio: casi imposible de ver. 

Rajada de Koeman por el penalti: "No entiendo el VAR, sólo se usa cuando es contra el Barça"

De hecho, desde 1992, sólo se habían pitado dos más hasta este encuentro. El último había sido en 2007, que marcó Ruud Van Nistelrooy.

Este fue, además, el primer gol de Ramos en un Clásico que no es de cabeza e igualó a Ronald Koeman, precisamente, como el defensa más goleador en un encuentro entre Barcelona y Madrid. Ambos han hecho cinco.