La confección de la plantilla del Real Madrid femenino incluía varios talentos españoles: Ivana Andrés, Marta Corredera, Marta Cardona u Olga Carmona entre otras firmaron sin problemas, pero David Aznar pidió otros nombres. Uno de ellos era el de Eva Navarro, posiblemente una de las futbolistas jóvenes de mayor talento de Europa.

El BOE publica el primer Convenio Colectivo del fútbol femenino

Su nombre ya estuvo sobre la mesa del equipo cuando aún era el CD Tacón en verano de 2019, pero la futbolista prefirió agotar su contrato con el Levante para firmar libre en este verano. Irónicamente, el primer convenio colectivo del fútbol femenino con el que las condiciones laborales de las mujeres en el balompié iban a mejorar se lo ha impedido.

En marzo de 2020, en plenas negociaciones entre todas las partes, los clubes y los sindicatos consiguieron crear la llamada lista de compensación, en la que se incluyeron los nombres de 17 futbolistas menores de 23 años mediante la cual cualquier club español (no afecta a los extranjeros) que quisiera llevárselas debía pagar una cantidad estipulada en concepto de formación futbolística por las jugadoras que acabaran contrato. En el caso de Eva Navarro, esa cantidad era de 500.000 euros, diez veces más que la cláusula de rescisión que tenía su contrato.

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La atacante, que ya es una fija en las convocatorias de la selección femenina, tenía ofertas de varios equipos europeos, pero la más potente era la del Real Madrid. La futbolista quería ir, pero el club blanco no estaba dispuesto a pagar medio millón de euros, dado que el mercado del fútbol femenino no maneja esas cifras ni por asomo. En España, de hecho, el traspaso más caro fueron los 50.000 euros que pagó el Barcelona al Atlético por Mapi León.

Así, sin el Real Madrid, Navarro se ha visto obligada a elegir: o renovar con el Levante o pagar de su bolsillo dicha cláusula para quedar libre del todo. La decisión era casi evidente. Navarro ha renovado, pero los aficionados no han dejado clara su opinión: