Continúa la polémica por las críticas de Donald Trump contra los jugadores de la NBA por arrodillarse durante el himno nacional. Esta vez fue LeBron James quien cargó contra el presidente de Estados Unidos, quien aseguró que "cuando veo gente arrodillada sin respetar nuestra bandera y nuestro himno lo que hago es apagar el partido".

La estrella de Los Angeles Lakers, es uno de los jugadores más comprometidos con las reivindicaciones sociales en el país norteamericano, compareció ante los medios tras la derrota de su equipo frente a los Oklahoma City Thunder y atizó a Trump al asegurar que "el mundo del baloncesto no está triste por perderle como espectador, no nos podría importar menos".

Además, apuntó que "cuando escuchas las entrevistas tras el partido te das cuenta de que arrodillarse no tiene nada que ver con la bandera, ni los soldados, ni las personas que hacen que nuestro país siga siendo un país libre".

James no quiso entrar en polémica pero dejó otro recado al dirigente, al afirmar que "el juego va a continuar sin sus ojos puestos en él. Puedo hablar en nombre de todos los que amamos el baloncesto, no podía importarnos menos".

LeBron fue más allá al invitar a los estadounidenses a recordar todo lo que están viviendo para tenerlo en cuenta a la hora de votar en las próximas elecciones presidenciales, que se celebrarán en noviembre.

"Espero que cualquiera, da igual la raza o el color, pueda ver el liderazgo que tenemos en nuestro país. Noviembre está a la vuelta de la esquina y es un gran momento para nosotros como americanos, si seguimos hablando como lo estamos haciendo todo puede cambiar. Es un gran momento para nosotros como americanos".