Thibaut Courtois fue uno de los grandes protagonistas del partido entre Valencia y Real Madrid disputado en Mestalla, que terminó en empate gracias a un gol de Benzema a la salida de un córner en la última jugada. Un gol que vino precedido por el remate del portero madridista, que tras el gol se encaró con el público valencianista.

El guardameta belga subió a rematar el saque de esquina por iniciativa propia, según reveló Zinedine Zidane en la rueda de prensa postpartido. Eso sí, convertirse en el héroe del madridismo le costó ser el blanco de las críticas de la afición local.

Esta le dedicó todo tipo de gritos y pitos, algo a lo que Courtois no quiso responder en un principio y, de hecho, hizo un gesto de taparse los oídos para que los hinchas entendieran que sus críticas le resbalaban.

Eso sí, llegó un momento en el que el portero perdió los papeles y decidió replicar a quienes le insultaban desde detrás de su portería, lanzándoles unos besos.