Mustafa Mohammad Jaber pasará a la historia por realizar una temeraria entrada a un rival que no tardó en compararse a la brutal patada de De Jong a Xabi Alonso en la final del Mundial de Sudáfrica 2010. El jugador iraquí fue el protagonista negativo del partido entre su selección y la de Yemen disputado en el Estadio Abdullah bin Khalifa.

Van Dijk se hace un hueco entre las entradas más salvajes de la historia 

Los goles brillaron por su ausencia en aquel encuentro, correspondiente a la fase de grupos de la Copa del Golfo, que quedó eclipsado por la expulsión de Mohammad Jaber. 

Esta se produjo a los 8 minutos de partido, cuando el triste protagonista de la noche trató de arrebatar el balón al yemení Ayman Al Hagri, a quien casi le arranca la cabeza. La entrada conllevó la tarjeta roja directa y puede acarrearle una dura sanción.

Además, lejos de disculparse con Al Hagri, el defensa iraquí protestó la decisión del colegiado, igual que su seleccionador, Srečko Katanec, quien hizo gestos de risa como muestra de protesta.