Casemiro fue uno de los jugadores del Real Madrid que se detuvo en la zona mixta tras la victoria de su equipo sobre el Leganés. El brasileño quiso destacar el trabajo colectivo en la mayor goleada madridista de la temporada y rompió una lanza a favor de Gareth Bale, quien volvió a ser protagonista pese a no vestirse de corto.

El galés, que está lesionado, acudió al Santiago Bernabéu tal y como establece el código de comportamiento del Madrid, pero fue captado cuando abandonaba el coliseo blanco en el minuto 82, con 4-0 en el marcador y a faltaba que Jovic cerrara la cuenta.

"A mi lo que me importa es lo que haga en el campo", afirmó Casemiro sobre su compañero, que esta semana viajó a Londres por motivos personales y tuvo un desplante a su regreso con un niño que le esperaba en el aeropuerto.

Las normas internas del club obligan a los jugadores a permanecer en el estadio hasta el minuto 80, por lo que Bale lo cumplió y no será multado, pero las imágenes de su salida del Bernabéu provocaron numerosos comentarios por marcharse sin haber bajado al vestuario a felicitar a sus compañeros.

Zinedine Zidane volvió a restar importancia al último lance del galés y confirmó que estaba al tanto de que Bale se iría antes de tiempo.

"Hablé con él en el vestuario. Si se ha marchado antes es porque tiene permiso para ello ", afirmó Zidane en la conferencia de prensa postpartido.