El próximo mes de marzo el cielo de Canarias será escenario de un insólito espectáculo: una decena de cazas supersónicos, procedentes de la Base Aérea británica de Lakenheath, se desplazarán al archipiélago para realizar un combate de entrenamiento contra una veintena de los mejores aviones de combate supersónicos del Ejército del Aire español.

La Base Aérea de Gando actuará como centro operativo del ejercicio desde el que despegarán todas las aeronaves implicadas en el entrenamiento de ataques aire-aire.

Será el mayor despligue realizado nunca por la Fuerza Aérea estadounidense y el Ejército del Aire español de forma conjunta.

La batalla aérea se desarrollará en una franja de espacio aéreo situada al sur de las islas y carente de restricciones de operaciones militares por su lejanía.

Se descarta, en principio, que las estampidas sónicas -el impacto sonoro por la ruptura de la barrera del sonido- que se producirán en el curso de la batalla lleguen a ser percibidas por la población canaria.

El combate supondrá el despliegue conjunto de unas 35 aeronaves militares españolas y estadounidenses, además de un avión AWACS de la Flota de Alerta Temprana de la OTAN, con base en Geilenkirchen (Alemania).

Una de las principales estrellas del ejercicio será el caza supersónico estadounidense F15, el avión de combate que logró en 2005 que su flota repartida alrededor del mundo alcanzara el récord de más de cien bajas enemigas sin un solo derribo.

España pondrá en escena su Mirage F1, el aparato más veloz de toda la flota militar española, capaz de doblar la velocidad del sonido hasta alcanzar 2,3 Mach (2,3 veces la velocidad del sonido).

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