El presunto cerebro de los atentados del 11 de septiembre de 2001 en Estados Unidos, Jalid Sheij Mohamed, rechazó el jueves a sus abogados y pidió representarse a sí mismo ante el tribunal militar antiterrorista en el que comparece. "Mi protector es Alá", señaló, y añadió que su religión le prohíbe aceptar un abogado de Estados Unidos."No aceptaré ningún abogado. Me representaré yo mismo", dijo el acusado, tras
Jalid Sheij Mohamed, de 54 años y nacido en Kuwait pero criado en Pakistán, también pidió poder hablar con los otros cuatro presuntos miembros de Al Qaeda junto a los que es procesado, pero el juez manifestó que no permitirá "una defensa conjunta".
"Mi inglés no es malo"
El presunto cerebro del 11-S apareció públicamente por primera vez desde su captura en 2003, ataviado con una túnica y gorro blancos que, según la coronel del Ejército Wendy Kelly, usan normalmente los prisioneros en la base naval estadounidense de Guantánamo, situada en territorio de Cuba.
El principal acusado apareció en la audiencia con una larga y canosa barba, mientras que en las fotos distribuidas por el Pentágono cuando fue capturado en 2003 en Pakistán aparecía con bigote. Jalid Sheij Mohamed protestó en inglés porque en una declaración anterior, cerrada a la prensa, y ante una junta militar "tradujeron mal" sus palabras y pusieron otras en su boca. "Mi inglés no es malo", dijo el acusado, quien estudió ingeniería en Carolina del Norte, pero aun así pidió un traductor.
Del mismo modo, Ali Abdul Aziz Ali, otro de los acusados, protestó al alegar que sólo había hablado con su traductor cinco minutos antes del inicio de la vista, y declaró que se considera "sin traductor". "He tenido problemas con los traductores que han traducido mal o entendido mal", afirmó el acusado en inglés, y pidió un traductor de la zona del golfo Pérsico.
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