Julián Muñoz ha empezado el año en los tribunales. Tras estar el pasado martes en los juzgados de Marbella, el jueves lo veíamos en la recién inaugurada ciudad de la justicia de Málaga. El motivo, como de costumbre: un delito urbanístico por el cual estaban acusados siete ex ediles más, entre ellos su propio sobrino y abogado de profesión, Alberto García Muñoz.

La defensa del ex alcalde de Marbella y de otros siete ex ediles del Ayuntamiento marbellí han iniciado una serie de negociaciones con la Fiscalía para agilizar la tramitación de las numerosas causas que colapsan actualmente los juzgados. La posible unificación de las causas abre un horizonte judicialmente más benévolo para Julián Muñoz.

El novio de Isabel Pantoja, que apareció con unos kilitos de más y muy elegante con traje de chaqueta, se librará de la pena de un año de cárcel si desembolsa 10.800 euros de multa en un plazo de cinco días. Su defensa ha pedido en numerosas ocasiones que se juzgue al ex alcalde por un delito continuado y no por un centenar de diferentes delitos. El ex alcalde ha gozado de la compañía de Foski, su chófer personal, que no lo abandona ni a sol ni a sombra.

El chófer, quien ya se atreve a hablar con los medios, relató la dura Navidad que ha pasado Julián. De la dudosa cojera que día sí día no presenta el ex alcalde, Foski asegura que "hay partes médicos".

Por su parte, el sobrino de Julián no ha contestado a ninguna de las preguntas. Ni siquiera, ha hablado de la carta que envió al periódico El Mundo en la que denunciaba la situación tan penosa e injusta que estaba pasando su tío.