En una comparecencia de una hora, el expresidente de Bankia, Rodrigo Rato, ha resumido este martes en el Congreso de los Diputados su visión sobre la crisis de la banca, la caída de Bankia, el rescate financiero y el papel de los organismos, los políticos y el suyo propio en un lustro convulso para la economía española.

El exvicepresiente del Gobierno —procesado por falsedad contable en el caso Bankia— acudía a la Comisión de Investigación que investiga la crisis financiera para ofrecer un testimonio que ha eludido la autocrítica. "Yo no soy un político delincuente. En 30 años de política no me puede acusar de delincuente", ha dicho airado después de que la diputada de ERC, Esther Capella, haya aseverado que Rato personifica la "marca" de una España "corrompida y que corrompe", basada en el "amiguismo y el nepotismo" y que representa un sistema impune y "depredador".

Muy al contrario, quien fuera primera opción por Aznar para relevarle en el liderazgo del partido —el delfín finalmente fue Rajoy—  no escatimó en señalar a varias direcciones para echar la culpa de la crisis. No se han librado ni rivales políticos (como el expresidente Zapatero) ni su propio partido. El ministro Luis de Guindos, de hecho, ha sido el mayor objetivo de sus dard0s. Ha sugerido que el rescate de Bankia se decidió al margen del Banco de España y que se hizo para beneficiar a sus competidores.

Hacia Rajoy: "España solicitó el único rescate que le ofrecieron"

El presidente Rajoy presume siempre que tiene ocasión de que su gestión evitó el rescate del país, pero Rato ha dado a entender que el Ejecutivo popular quiso el rescate completo de España tras su llegada al poder (como ocurrió en Portugal o Grecia) y, sin embargo, sólo logró un rescate financiero en 2012.

En junio de ese año, ha dicho, España solicitó "el único rescate que le ofrecieron" y la prima de riesgo española llegó a 700 puntos básicos, 400 puntos por encima que un año antes. Según Rato, eso contribuyó a que entre enero y septiembre de ese año 250.000 millones salieran de la banca española, el 25% del PIB del país.

Además, ha lamentado que varios ministros del Ejecutivo de Rajoy fueron dejando caer acusaciones  en público y en privado hasta acabar con su detención en abril de 2015. "Y me da mucha pena, porque he estado 30 años en el PP", ha señalado. Rato ha recordado que su detención partió de una denuncia de Hacienda y que se cayó " los 15 días".

Según Rato, un día antes se había publicado una información acerca de que el Servicio contra el Blanqueo de Capitales, que depende de Economía —es decir, De Guindos— le estaba investigando y que el periodista se reunió un día antes con el ministro. También acusa al ministro de Justicia Rafael Catalá de revelar sus datos fiscales en la televisión. "¿Cómo puede saberlos? Es una pregunta que todavía no he sido capaz de contestar", ha añadido.

A todo ello suma que entre los meses de marzo y febrero de 2015 fue avisado por tres personas de que el Gobierno quería meterle en la cárcel". Se trata de un director de un medio de comunicación, de un articulista y de un ex alto cargo del PP. Y también acusa a la ministra de Trabajo, Fátima Báñez, de decirle a su secretaria que se "separara" de él porque "iba a tener problemas".

Hacia De Guindos: "La acción se desplomó en el momento que exigió mi dimisión"

El exministro de economía de 1996 a 2004 recuerda que el Ejecutivo, entonces, legisló más exigencias para cubrir el riesgo inmobiliario: un decreto en febrero —que BFA-Bankia cubrió— y otro en mayo. Antes de aprobarse, dice Rato, De Guindos le exigió que dimitiera como presidente de Bankia.

Rato acusa a Guindos de maquinar al margen del Banco de España porque la petición de dimisión se produjo, dice, en una reunión con grandes banqueros como Botín (Santander), González (BBVA) y Fainé (CaixaBank).

Y no era el primer encuentro. Hubo otro dos. "En ninguna de estas tres reuniones estuvo presente el Banco de España", ha dicho Rato, que cree que directamente "se le ocultaron estas reuniones". Los tres banqueros citados admitieron en 2013 ante el juez Andreu que fueron convocados los días 4 y 6 de mayo de 2012 por Guindos para abordar con él y con Rato la preocupación que existía en los mercados internacionales por Bankia.

Guindos, dice pidió a "los principales competidores de Bankia" que calcularan las provisiones que necesitaría su banco. "Estos mismos competidores fueron, sin duda, los grandes receptores de depósitos que salieron de Bankia tras su nacionalización en el verano de 2012". Es decir, salieron beneficiados.

Además, ha recordado que la cotización de Bankia se mantuvo por encima de la media del sector desde el momento de su debut en Bolsa, en abril de 2011 hasta mayo de 2012, y que fue cuando Guindos le "exigió la dimisión, el momento en el que la acción se desplomó".

Rato ha señalado que las acciones de todos los bancos españoles comenzaron a caer cuando Guindos, poco después de asumir su cargo como ministro de economía, dijo ante la opinión pública internacional que el sector necesitaba más de 50.000 millones.

Hacia Rodríguez Zapatero: "Nos dijeron que la estabilidad macroeconómica estaba garantizada"

Rato ha responsabilizado además al expresidente José Luis Rodríguez Zapatero de relajar las exigencias a las entidades financieras y provocar la burbuja de crédito. Según el exministro de Economía "la explosión de crédito de produce desde 2004" —el año en que el Ejecutivo socialistallega al poder— y cita como dato que la relación de crédito y PIB no superaba el 120% hasta 2003 y llegó al 210% en años posteriores.

Los expertos consideran que fue en los años de Rato al frente de Economía cuando se gestó la burbuja inmobiliaria. Pero él lo niega. Para Rato, lo que sucedió fue que la preferencia española por ahorrar a través de la propiedad de  casas empezó a satisfacerse y emergió una "demanda embalsada" tras un periodo de altas tasas de paro y tipos de interés elevados.

Rato, en cambio, considera que Zapatero abandonó las reformas que evitaran esta explosión del crédito. Como ex director  del FMI —de 2004 a 2007— concluyó en 2006 un informe sobre  cajas pedido en 2003 por el Ejecutivo de Aznar que recomendaba profesionalizar las cajas de ahorros y abrirlas al mercado de capitales, pero "lamentablemente", dice, no produjo ningún efecto en las autoridades de aquel momento.

Además, dice que en 2007 el FMI llamó la atención a España por el crecimiento del déficit exterior y los representantes españoles aseguraron que "la estabilidad macroeconómica estaba garantizada".

Hacia Goirigolzarri: "Los 19.000 millones se pidieron por los nuevos responsables de Bankia"

Rato se ha quitado también responsibilidad de la solicitud del rescate de 19.000 millones para la entidad. "Se pidieron por los nuevos responsables de Bankia al Gobierno", ha dicho. "Son dinero público y yo no pedí".

Ha recordado que tras su dimisión, De Guindos cifró en 7.000 millones las necesidades de Bankia para cumplir con los nuevos requerimientos de provisiones, por lo que teniendo en cuenta que el grupo ya había dotado parte, le quedaban unos 5.000 millones.

Sin embargo, también ha rememorado que De Guindos añadió que el Gobierno estaba dispuesto a dar a los nuevos gestores de Bankia, ya presidida por José Ignacio Goirigolzarri, todo lo que pidieran y se tradujo en una inyección de más de 19.000 millones. "Nunca consideré que fueran necesarios para sanear. Para tener el banco más capitalizado de España, eso ya es otra cuestión y otra estrategia. Que el que la diseñó, la explique.

"Por primera vez se concedió ayudas a una entidad sin ser evaluadas por el Banco de España", recuerda Rato. En respuesta al diputado de Izquierda Unida Alberto Garzón, ha asegura que esa ingente cantidad —sumada a  a los más de 4.500 millones prestados anteriormente— no se justifican salvo en un caso de extrema gravedad.

Es la empresa Oliver Wyman, contratada por el Gobierno, quien justifica esa ayuda en un escenario muy distinto, totalmente adverso, de dos años de caídas de la economía y grandes pérdidas, ha explicado, tras recordar que el Banco de España, en sede judicial, consideró luego que ese dinero era para dar una rentabilidad del 13% a los grandes inversores.

Hacia el Banco de España: "Me llamaron del Banco de España para meter a Bancaja en la fusión"

Rato afirma que la fusión fría de Caja Madrid era con cinco cajas pequeñas, pero que el Banco de España le pidió que sumase a una más. "En julio de 2010 el Banco de España me llamó al despacho del gobernador [entonces era Miguel Ángel Fernández-Ordóñez] para introducir a Bancaja, de ese despacho se nos trasladó al del subgobernador para que avanzásemos de urgencia en la incorporación", ha revelado Rato.

Posteriormente, las mayores exigencias de capital para las cajas llevaron a Bankia a decidir salir a bolsa. El Banco de España y Economía aprueban la operación. Se produce en julio de 2011, se captan más de 3.000 millones y más del 40% entre inversores institucionales, "como exigió la CNMV", con un descuento muy superior al estimado pero "cumpliendo escrupulosamente" las condiciones impuestas por los reguladores.

El exministro ha desautorizado también a los dos peritos judiciales del Banco de España en la causa que investiga la salida a Bolsa de la entidad. "Se han peritado a si mismos en dos ocasiones", ha sostenido al asegurar que no han mantenido siempre un criterio homogéneo en los tres informes que han enviado al juzgado.

Rato, por otro lado, lamenta que tras su mandato "se abandonara" el consenso político para elegir la Comisión Ejecutiva del Banco de España, a pesar de los acuerdos alcanzados con el PSOE anteriormente para "evitar la politización de la cúpula" del organismo supervisor.

Hacia la CNMV: "La información de salida a Bolsa estaba totalmente controlada por la CNMV"

La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) también ha estado en el punto de mira del expresidente de Bankia. Rato ha defendido que la información proporcionada por la entidad a los minoristas antes de salir a Bolsa estaba "totalmente controlada" por el organismo y que no existen usuarios que puedan afirmar que fueran "forzados" por la entidad a comprar acciones.

Rato recuerda que el resultado de la colocación fue valorado "positivamente" por el Gobierno y como por el Banco de España. De hecho, recuerda que los máximos responsables de la CNMV y del Banco de España testificaron en la Audiencia Nacional que se "había cumplido" todos los requisitos legales en su constitución y en su salida a Bolsa.

"La colocación se realizó por la cantidad esperada, cumpliendo escrupulosamente las condiciones de la CNMV", ha sostenido el expresidente de Bankia sobre la entidad que entonces presidía Julio Segura, con Fernando Restoy como vicepresidente. Ambos declararon en la Audiencia Nacional que su papel solo era aprobar el folleto informativo de la salida a Bolsa.

"¿Usted cree que la CNMV, que el Banco de España y que todas las casas importantes de auditores que trabajaron para nosotros, que todos estaban equivocados?", le ha reprochado a Roldán cuando le ha preguntado por la salida a bolsa de Bankia. "Ni el Banco de España ni la CNMV han variado su posición sobre la veracidad de los estados contables, ni sobre la rectitud de las cuentas ofrecidas a los inversores en la salida a Bolsa", ha indicado.