La Guardia Civil mantiene este jueves un dispositivo de vigilancia a las puertas de una empresa de Constantí ante sospechas de que puede haber imprimido material para la votación en el referéndum del 1 de octubre.

Fuentes cercanas al caso consultadas por Europa Press han explicado que de momento se está requiriendo información a la empresa, a petición del fiscal, en el marco de las investigaciones que lleva el Juzgado de Instrucción 13 de Barcelona sobre preparativos del referéndum, aunque más adelante se puedan acordar otras diligencias.

La empresa ha asegurado que es "falso" que estén imprimiendo material para el 1-O, y ha indicado que los agentes están a las puertas de la empresa pero que no han entrado en sus dependencias. Los agentes se limitan a controlar los vehículos que salen del recinto para descartar que lleven consigo material vinculado al referéndum.

Según publicó el diario digital local 'La República', en esta sociedad se pueden haber estado imprimiendo ejemplares de la 'Lista numerada de votantes', un documento de 24 páginas en catalán y castellano, en el que se incluyen instrucciones para los miembros de las mesas electorales.

En este documento puede estar incluida una cuadrícula que se rellene con los nombres de los votantes en las mesas de votación.Agentes de la Guardia Civil vigilan desde primeras horas de la tarde de este miércoles la sede de una imprenta ubicada en un polígono industrial de Constantí (Tarragona), que según fuentes conocedoras de la actuación policial podría imprimir el censo para el referéndum soberanista del 1 de octubre.

Dos vehículos de la Guardia Civil, con dos agentes en cada uno de ellos, se encuentran estacionados frente a las dos entradas de la imprenta, según ha podido constatar Efe.

Los agentes de la Guardia Civil registran los vehículos de los empleados de la empresa cuando salen del aparcamiento de la misma en busca de cajas que pudieran contener documentos.

Esta actuación, que todavía sigue activa, se produce el mismo miércoles en el que el Parlament ha aprobado la ley del referéndum, para amparar la votación anunciada para el 1 de octubre, en uno de los debates más tensos y maratonianos de la historia de la cámara catalana.

La ley ha obtenido 72 votos a favor de los grupos independentistas de JxSí y la CUP, y del diputado no adscrito, Germà Gordó, ninguno en contra y 11 abstenciones de Catalunya Sí Que Es Pot, mientras que los diputados de Ciudadanos, el PSC y el PPC han abandonado el hemiciclo, como habían anunciado, antes de la votación.