Mientras el mundo se enfrenta a la peor crisis de refugiados desde la Segunda Guerra Mundial, el Gobierno del Partido Popular reduce las concesiones de asilo y refugio. España recibió en 2015 más peticiones de asilo que nunca: 14.881 personas llamaron a las puertas de nuestro país para pedir protección.

De esos expedientes, sólo 3.240 han sido resueltos por el momento. El total de peticiones de asilo y refugio autorizadas el año pasado descendió hasta las 1.020. Esto quiere decir que en 2015 España denegó cualquier tipo de protección al 68,5% de las personas cuyo expediente se resolvió. La lentitud burocrática —el 78% de las petiticiones aún está pendiente— y el elevado porcentaje de denegaciones se unen para provocar que solo tres de cada diez personas que tramitaron su solicitud consiguieran algún tipo de protección.

En 2014, un año con muchas menos peticiones (5.947), España concedió protección a 1.119 personas, casi un centenar más que en 2015. En términos relativos, el porcentaje de peticiones denegadas en 2014 fue del 56%, doce puntos porcentuales menos que en 2015, lo que confirma que España se encuentra en inmersa espiral regresiva respecto a la protección de los refugiados.

Estos datos se desprenden del informe anual de la Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR), presentado este jueves. A ojos de Estrella Galán, secretaria general de CEAR, todas estas cifras llevan de manera inedulible a la siguiente conclusión: "En el año 2015 el derecho de asilo retrocedió de manera alarmante en España y en Europa".

En concreto, España autorizó 220 estatutos de refugiados el año pasado. En 2014, con menos peticiones, se hicieron 384 concesiones. Además, el año pasado 800 personas consiguieron protección subsidiaria, que dura cinco años y luego se evalúa de nuevo su situación, lo que también supone un descenso frente a las 1.199 registradas en 2014.

A pesar de que España recibió más peticiones que nunca, los casi 15.000 solicitantes de asilo que acudieron a España representan solo el 1% de los expedientes tramitados por los 28 países de la Unión Europea. En total, el club comunitario recibió 1,3 millones de solicitantes de asilo y el país con más peticiones fue Alemania (476.510).

Más de la mitad de las solicitudes recibidas por España, procedían de Siria -5.724- y Ucrania -3.420-. La llegada de refugiados sirios por el puesto fronterizo de Beni Enzar convirtió a Melilla en la provincia donde se presentaron más peticiones —6.368, el 42,8% del total—. Sobre ellos, el informe destaca que "resulta alarmante que frente al aumento de solicitudes de protección de personas que proceden de paises de conflicto los índices de concesión hayan disminuido".

A pesar de que la protección de los solicitantes de origen sirio se ha visto reducido, su situación es mejor que la de solicitantes procedentes de otras zonas de guerra. CEAR asegura que sigue identificándose "un trato diferenciado" entre las personas sirias y aquellas que proceden de otros países en conflicto como Ucrania o Malí, cuyos expedientes están "congelados" en espera de que los conflictos lleguen a su fin.

El estudio de CEAR llama la también la atención sobre que España no concedió la residencia por razones humanitarias ni a una sola de las 2.220 personas a quienes denegó la protección internacional. "El precario compromiso del Gobierno con las personas refugiadas menguó aún más en 2015", concluye el informe.

Mientras tanto, siguen llegando solicitantes de asilo. Solo en el primer trimestre había 18.805 solicitudes en España pendientes de resolución, más del doble que un año antes, en marzo de 2015, cuando eran 8.830 (+113%), según datos publicados este jueves por la agencia estadística de la UE, Eurostat.

En el conjunto de Europa, en marzo eran más de un millón los refugiados pendientes de la resolución de sus trámites burocráticos para la solicitud de asilo (1.011.990).  Un año atrás este número era la mitad, 560.000. Por países, Alemania, Suecia, Austria, Italia y Francia eran los que tenían más peticiones todavía pendientes.

En el caso español, según los datos de Eurostat, en enero hubo el pico máximo de solicitudes de asilo pendientes de resolver (con 19.200), cifra que bajó en febrero a 18.025 y que ha vuelto a incrementarse en marzo en 800 solicitantes (18.805).

La estadística revela sin embargo un descenso brusco en la llegada de nuevos solicitantes de asilo, caída que en el conjunto de Europa fue del 33% con respecto al último trimestre de 2015. Así, 290.000 personas pidieron asilo en el conjunto de países miembros de la UE. Ese descenso ha sido incluso mayor en España, del 35%, al bajar de 4.435 a 2.905.

Entre los que pedían el asilo por primera vez los sirios eran la principal nacionalidad (102.000, entre enero y marzo de 2016), por delante de iraquíes y afganos (ambos con 35.000). Eurostat comprueba que seis de cada diez peticiones de asilo en la UE se realizan en Alemania (175.000), seguida de lejos por Italia (22.300), Francia (18.000), Austria (13.900) y Reino Unido (10.100).