Pedro Sánchez empieza a ver a Albert Rivera en el retrovisor. Las encuestas del mes de octubre sitúan a Ciudadanos cada vez más cerca de un partido socialista que continúa cayendo en intención de voto, con Podemos en cuarto lugar. Tres estudios demoscópicos afirman, incluso, que los naranja están por delante de los socialistas, pero los expertos advierten de la dificultad de asignar porcentajes de escaños y votos sin que la campaña para las elecciones generales del 20 de diciembre haya comenzado.

Metroscopia, DYM y TNS otorgan a Ciudadanos la condición de líder de la oposición si los comicios se celebrasen hoy, con porcentajes de entre el 20-22% de los votos. Es la primera vez que el partido alcanza esa cota, pero este fenómeno tiene explicación. "Se debe a su gran resultado en las elecciones catalanas. "Experimenta la misma primavera que vivió Podemos tras las elecciones europeas de 2014, cuando las encuestas llegaron a situarlo como primer partido", explica el politólogo e investigador social Gonzalo Caro.

Su resultado estaría, por lo tanto, inflado, aunque el experto concede que el marco de discusión de la campaña de las generales podría continuar beneficiando a los de Albert Rivera: "La cuestión soberanista en Cataluña pone su discurso de unidad y reforma en la agenda, así que les favorece".

Otras tres encuestas, las de GAD3, My Word y Celeste-Tel, mantienen a Ciudadanos en el tercer puesto. Este resultado, juzga Caro, es más ajustado a la realidad, porque registra la tendencia ascendente del partido sin menospreciar el papel de sus rivales. De la misma opinión son los analistas de Electrograph y el especialista de El Español Kiko Llaneras, que, tras ponderar los últimos datos mantienen a Albert Rivera por detrás de Pedro Sánchez y en el entorno del 16-18% de los apoyos.

A 40 días de las votaciones, cinco de los seis estudios coinciden en que el PP se llevaría la victoria el 20-D al sumar el 26-28% de los sufragios (solo Metroscopia lo rebaja al 23,5%). El PSOE se mueve en la franja del 19-21%, pugnando por ser la alternativa mayoritaria. "Ambos parecen conservar su suelo electoral. La lucha del PP es ser el partido más votado para poder liderar los pactos postelectorales con Ciudadanos", señala Gonzalo Caro.

La línea descendente de Podemos le hace oscilar en el entorno del 14%. Caro cree que Pablo Iglesias tiene "margen de mejora". ¿Suficiente como para alcanzar a Ciudadanos? "La ruptura de la unidad popular con IU les ha afectado, pero es muy difícil saberlo", remacha.

El quinto actor es Izquierda Unida. La coalición experimenta un repunte en todas las encuestas gracias a los esfuerzos de su candidato, Alberto Garzón, por lograr una candidatura de confluencia, pero su resultado continúa siendo incierto (3%-6%). "Aún no se conoce la marca con la que irá a las generales ni la que defenderá en Galicia, Cataluña o Comunidad Valenciana, por ejemplo", precisa el politólogo.

Caro insiste en esperar a la encuesta preelectoral del CIS, la "más amplia" y que sirve a los partidos para terminar de ajustar sus posiciones. "Las tendencias están claras: el PP sufre una sangría de votos respecto a las generales de 2011, el PSOE sería la segunda fuerza y Podemos se estanca. La circunscripciones pequeñas van a ser muy importantes, porque el voto de Ciudadanos y Podemos es muy urbano y se puede dar la circunstancia de que, teniendo más votos en las grandes ciudades, cosechen menos escaños", concluye.