El rodaje de la película Evo Pueblo, dedicada a la vida del presidente de Bolivia, Evo Morales, concluyó este domingo con la filmación de una escena sobre la muerte del líder indio Tupac Catari, que fue descuartizado durante la colonización española.

El director de la cinta, el boliviano Tonchi Antezana, señaló que la escena (la última en grabarse) fue la más compleja que filmó porque necesitaba de una logística especial, con vestuarios y armas antiguas, pero será la primera de la película cuando se estrene en septiembre u octubre próximos.

La adaptación de la muerte de Catari, quien fue destrozado en sus extremidades por cuatro caballos, fue filmada en el hipódromo de la ciudad central de Cochabamba, con un sistema de montaje digital para reproducir una escenografía altiplánica.

La filmación de toda la película ha necesitado casi seis meses desde que se iniciara a mediados de diciembre pasado.

El espejo de Morales

Catari, quien es uno de los líderes indios que inspira a Morales, dirigió una sublevación en 1781 contra las autoridades coloniales que lo condenaron a morir descuartizado en la localidad andina de Peñas, en tanto que su esposa, Bartolina Sisa, fue ahorcada.

Evo Pueblo cuenta la vida de Morales desde su infancia, en el caserío andino de Orinoca, los diversos oficios que desempeñó para sobrevivir, su liderazgo sindical en la zona cocalera del Chapare, su ingreso a la política y su llegada a la Presidencia de Bolivia, en enero de 2006.

"Es simplemente una historia, no pretende ensalzar a un Evo superhéroe, ni busca denigrar a una persona. Simplemente es una historia", dijo Antezana.

La mayoría de las escenas fueron filmadas en muy poco tiempo, pero restaba la dedicada a Catari que, a juicio del director, será una de las emblemáticas de la película.

Gran despliegue

En el filme participaron en total unos 53 actores, la mayoría novatos, entre ellos, Valerio Queso que interpreta a Morales, además de unos mil extras.

La idea de llevar la biografía de Morales al cine surgió en abril del año pasado y tuvo varios problemas para concretarse por falta del apoyo económico estatal y de las empresas privadas para el presupuesto que, según Antezana, ronda los 300.000 dólares, y que fueron financiados por inversores particulares.

La obra fue apoyada con dinero y equipos por la productora británica Buena Onda, dirigida por Donald Ranvaud, quien participó en cintas premiadas internacionalmente, como las brasileñas Ciudad de Dios (2002) y Estación Central de Brasil (1998).

La postproducción de la mayoría del filme está muy avanzada y estará concluida a fines de agosto, de tal forma que se pueda estrenar en septiembre o en octubre, remarcó el director quien prevé distribuir Evo Pueblo en Argentina, España y Suiza.