Pedro Reina: "Los niños me dicen profe y me dan las gracias"

  • Los voluntarios han aumentado en Andalucía ante la crisis y los recortes.
  • El 63% son mujeres, con estudios y de edades entre 18 y 25 años o más de 55.
  • Los bancos de alimentos alimentan ya a casi medio millón de personas.
Pedro Reina Alcaide (Córdoba) transporta a niños en su furgoneta.
Pedro Reina Alcaide (Córdoba) transporta a niños en su furgoneta.
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Pedro Reina Alcaide (Córdoba) transporta a niños en su furgoneta.

Pedro Reina Alcaide tiene 25 años y desde hace dos lleva por las tardes en su furgoneta a 6 niños hasta el Hogar Mamá Margarita de Montilla (Córdoba).

"Me llaman profe y me dan las gracias. Me han enseñado nuevos valores. Un caramelo es para ellos la vida", explica este conductor voluntario.

Un total de 30 menores, de entre 5 y 15 años, en riesgo de exclusión social, reciben en este centro el apoyo necesario para favorecer su desarrollo afectivo, social, físico y académico. El proyecto ha creado una ola de solidaridad en este municipio cordobés.

Ani, su marido, Salvador; y sus dos hijas quisieron aportar su granito de arena y en febrero copiaron la idea del Macarrón Solidario de Valencia.

Casi todos los domingos reparten en Sevilla este plato casero a personas sin recursos que viven en la calle. Gracias a la solidaridad de otros sevillanos han llegado a servir varias raciones elaboradas con muchos kilos de pasta, tomates y carne picada. Pero es que, cuando pueden, les llevan ropa, sacos de dormir y hasta tiendas de campaña.

Ángela Ponce lleva tres años de voluntaria en el comedor que San Juan de Dios tiene en el centro de Sevilla, donde se atiende cada día a una media de 140 personas y que ha ofrecido 22.335 comidas desde el pasado mes de enero. Guadalupe Villegas colabora con esta misma entidad hace año y medio.

Para ambas, esta labor les ha dado la vida y les ha ayudado a superar graves problemas personales. "Al principio es muy duro", pero, al final, los usuarios se terminan "convirtiendo en tus amigos", explican.

Solidaridad

La solidaridad entre los andaluces ha crecido ante la crisis y los recortes. Hay muchos más ejemplos.

Un menor se desmayó el año pasado en un colegio de Los Pajaritos, una de las zonas más deprimidas de Sevilla, porque hacía días que no se alimentaba bien: solo comía arroz frito. Ahora, profesores del centro, de forma anónima, costean el servicio de comedor a algunos de sus alumnos: Cada beca sale por 560 euros al año.

El paro ha ido aumentando desde 2007 hasta afectar a 1.049.456 personas (últimos datos), pero también lo han hecho los voluntarios.

La Junta de Andalucía contabilizó en 2012 (últimas cifras) a 409.000 en las más de 2.300 entidades sin ánimo de lucro que operan en Andalucía. Son casi un 6% más que los que había en 2010.

La Plataforma Andaluza de Voluntariado señala que las mujeres representan al 63% de este colectivo (la mayoría posee estudios y tiene entre 18 y 25 años o más de 55). Y que los sectores de emergencia social (comedores sociales, distribución de alimentos...) son de los más demandados.

La Federación Andaluza de Bancos de Alimentos reparte ya cada año entre 40 y 50 millones de kilogramos de alimentos, ya que atiende ahora a casi medio millón de personas, más del doble que en 2007, según explica a 20minutos.es Javier Peña, presidente de la entidad.

Sus voluntarios, además, han pasado de ser unos 40 de media por cada banco provincial a algo más de unos 80.

Oferta laboral

No osbtante, el aumento de las cifras de voluntarios no es motivo de "orgullo" para la Plataforma Andaluza de Voluntariado, que desea "una mayor oferta laboral y mayores recursos para que la población andaluza en situación de exclusión social no aumente año tras año".

El presidente de la Coordinadora Andaluza de ONG, José María Ruiberriz, afirma que las cifras de voluntarios (muchos de ellos en situación de desempleo) han crecido a la vez que las "dificultades para absorber" su ayuda. Y agrega: "ha habido un notable avance de la desigualdad y la pobreza".

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