Los actos de violencia callejera se multiplicaron ayer en el País Vasco tras la detención en Francia de tres presuntos miembros de ETA.

Así, pocas horas después de las detenciones la Ertzaintza detuvo anoche en Bilbao a un joven que participaba en una manifestación no comunicada. En la protesta se produjeron incidentes, según el departamento de Interior.

Además, tras las detenciones se quemaron neumáticos sobre las vías en San Sebastián, al mediodía fue asaltado un "batzoki" del PNV en Vitoria y a partir de las 21 horas de anoche fueron quemados en Vizcaya tres cajeros automáticos en Markina y uno en Getxo y rompieron los cristales de un concesionario de Peugeot en Bilbao, donde también se celebró una manifestación no comunicada.

Una manifestación no permitida

Esta marcha se celebró a las 22:20 horas en la calle Ribera y se saldó con la detención de un joven por desórdenes públicos, amenazas e insultos a los agentes de la Ertzaintza que disolvieron la manifestación.

A las 22:40 horas los radicales prendieron fuego a un cajero automático en Getxo, en una entidad financiera ubicada en la Sarrikobaso, sin que se produjeran daños de importancia al apagar las llamas agentes de la Policía local.

Diez minutos después rompieron la cristalera de un concesionario Peugeot ubicado en la calle Lehendakari Agirre, en el barrio bilbaíno de San Ignacio.

Además, la discoteca Txitxarro de Deba, que sufrió un atentado de ETA en 2000 y es propiedad del hermano del dirigente empresarial guipuzcoano asesinado por ETA José María Korta, tuvo que ser desalojada anoche por una falsa amenaza de bomba.

En la tarde de ayer, un grupo de encapuchados irrumpió en el batzoki o sede social del PNV ubicado en la calle Cuadrilla de Vitoria y causó diversos daños materiales en el interior.