Una maniobra de Nibali destrona a Froome en la Tirreno-Adriático y le da otra etapa a Sagan

  • Purito Rodríguez, ganador de etapa en Chieti, acaba la etapa tercero.
  • Samuel Sánchez y Alberto Contador también pasaron al ataque.
  • En la general, Purito ocupa la tercera plaza y Contador, la cuarta.
  • La Tirreno-Adriático concluye este martes con una crono de 9,2 km.
Alberto Contador afronta un 30% durante la sexta etapa de la Tirreno-Adriático 2013.
Alberto Contador afronta un 30% durante la sexta etapa de la Tirreno-Adriático 2013.
JACINTO VIDARTE
Alberto Contador afronta un 30% durante la sexta etapa de la Tirreno-Adriático 2013.

En unos tiempos donde muchos gregarios muestran una potencia superior a la de los jefes de fila de formaciones rivales se agradece el concurso de ciclistas como Vincenzo Nibali. El italiano del Astaná, ganador de la Vuelta a España 2010 y defensor de su victoria en la pasada Tirreno-Adriático,  es de los ciclistas que anima cualquier competencia cuando considera que tiene margen para ganar. Lo intenta, incluso desde lejos.  Y en el intento, la penitencia: muchas veces su ambición no cuaja; pero otras veces, sí.

Entre esas ocasiones afirmativas quedará, desde este lunes, la sexta y penúltima etapa de la Tirreno-Adriático 2013, una jornada en la que se impuso el eslovaco Peter Sagan (segundo éxito en esta carrera y el quinto de 2014 para el chavalín de 23 años) y en la que Nibali dinamitó la general, desbancando de lo más alto al británico Chris Froome. Nibali pasó al ataque en la parte final de una lluviosa etapa de 208 kiilómetros, con la carrera ya recluida en un circuito de pendientes bestiales, descensos vertiginosos, rutas sinuosas y un asfalto mojado y brillante poco amigo de cautelas.

La valentía de Nibali

En el repecho, suave en buena parte de su trazado, intimidante en un tramo con el 27% de desnivel en el que algún corredor puso el pie en el suelo, feneció poco  a poco una fuga de hasta quince ciclistas (entre otros, el suizo Fabian Cancellara, el italiano Damiano Cunego o el vizcaíno Beñat Intxausti, quien coronaría el repecho, el puertecito, en primera posición) y, coronado, con una docena de kilómetros por delante, comenzó una carrera nueva. Nibali, buen bajador, arrancó en la bajada y sedujo a Peter Sagan, un ciclista de gran técnica, y, al rato, a Joaquim Purito Rodríguez.

Entre los tres abrieron un hueco de hasta medio minuto sobre un cuarteto formado por Alberto Contador (que partía segundo en clasificación), Samuel Sánchez, el estadounidense Chris Horner y el italiano Mauro Santambrogio. Más atrás, rondando el minuto, rodaba un tercer grupo más numeroso con el hasta hoy líder, Chris Froome, o el australiano Cadel Evans, entre otros.

Una contrarreloj para terminar

El trío de cabeza mantuvo las rentas, no así el cuarteto, y se presentó en la recta final de Porto Sant'Elpidio con 43 segundos sobre los perseguidores  y 48 sobre Froome. No existió sprint para dilucidar el ganador de la etapa: Sagan arrancó y cogió tan pronto ventaja que entró en meta besándose los bíceps de sus brazos y señalando su tobillo derecho. Nibali, nuevo líder, acabó segundo. Purito Rodríguez, tercero, ascendió a la tercera plaza de una general en la que Alberto Contador cae a la cuarta posición.

Este martes concluye la Tirreno-Adriático con una contrarreloj de 9,2 kilómetros en San Benedetto del Tronto. Una distancia que, a priori, no invita a que Froome pueda recuperar los  34 segundos que le distancian de Nibali. O mucho menos Purito, porque las cronos no son lo suyo, los 37. O Contador sus 48 segundos de desventaja. El que con seguridad no tendrá ningún margen de mejora es el luxemburgués Andy Schleck. El pequeño de los Schleck se retiró este lunes por problemas físicos y encadenó otra carrera por etapas sin completar. Desde agosto de 2011, el ciclista del Radioshack sólo ha finalizado dos pruebas por etapas y hasta el pasado GP di Camaiore, una carrera de un día, estuvo 312 días sin concluir una carrera en la que tomase pase.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento