Man Ray y Fritz L. Gruber, una amistad que duró 20 años y dejó una valiosa colección

  • El comisario de exposiciones y coleccionista alemán conoció al fotógrafo en los años cincuenta en París.
  • L. Fritz y su mujer Renata Gruber fueron amigos de Man Ray hasta la muerte del artista, que los retrató en varias ocasiones.
  • Una exposición exhibe cartas personales, objetos y obras de arte recién adquiridos por el museo Ludwig y que documentan la amistad.
'Estudio en dos tonos - efecto máscara', una de las fotos de Man Ray de la colección de Gruber
'Estudio en dos tonos - efecto máscara', una de las fotos de Man Ray de la colección de Gruber
Man Ray - © Man Ray Trust, Paris / VG Bild-Kunst, Bonn 2012
'Estudio en dos tonos - efecto máscara', una de las fotos de Man Ray de la colección de Gruber

Leo Fritz Gruber (1908-2005) —comisario de exposiciones, publicista y ávido coleccionista de fotos— conoció a Man Ray en los años cincuenta en París, a donde el artista había vuelto tras pasar en los EE UU la II Guerra Mundial.

Gruber estaba en la capital francesa haciendo contactos para llevar a Colonia (Alemania) a los autores de más renombre de la fotografía reciente. En el viaje conoció a Brassaï, Kertesz, Henri Cartier Bresson y a Man Ray. La amistad con este último fue la más duradera: se prolongó durante 20 años, hasta la muerte del artista en 1975.

La relación del alemán y su segunda mujer Renate con Man Ray quedó plasmada en arte, fotos, cartas, objetos, catálogos de exposiciones, retratos que el autor hizo del matrimonio... El museo Ludwig de Colonia (Alemania), que adquirió en septiembre de 2012 la colección de obras y documentos de la amistad de los Gruber con el artista, inaugura el 31 de enero Man Ray. L. Fritz Gruber Archiv (Man Ray. El archivo de L. Fritz Gruber) y pone a disposición del público el material.

Lee Miller, Picasso, Jean Cocteau, Max Ernst, Dora Maar...

Junto a retratos que ya pertenecían a los fondos del museo, se exponen una valiosa serie de 50 hojas de contactos con fotos de Lee Miller (con quien el artista tuvo una turbulenta relación antes de la guerra), Jean Cocteau, Max Ernst, Pablo Picasso, Dora Maar y otras personalidades importantes del siglo XX. También destacan las hojas de contactos que el fotógrafo hizo de sus rayografías, un término que empleaba para sus fotos hechas sin cámara, hechas con elementos colocados directamente sobre papel fotosensible.

Impulsor del dadaísmo y del surrealismo en los EE UU y gran amante de París, la ciudad en la que desarrolló la mayoría de su carrera, Man Ray conoció a Gruber cuando el alemán (ya entonces una figura consagrada del coleccionismo y un gran conocedor de la fotografía) visitaba la capital francesa como comisario de exposiciones para la recién fundada Deutsche Gesellschaft für Photographie (Sociedad fotográfica alemana).

En su pasión por el arte, atrajo la atención de conocedores de la fotografía de todo el mundo, se encargó de más de 300 muestras en Colonia de autores como Edward Steichen, Beaumont Newhall, August Sander, Irving Penn, Ansel Adams... En 1960, poco después de conocerlo, organizó una gran exposición de Man Ray. A su muerte a los 96 años, Gruber dejaba una colección de 2400 fotos y el recuerdo de haber tratado personalmente con muchos de los mejores fotógrafos de la historia.

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