El Ministerio del Interior ha anunciado una plan de reinserción para terroristas encarcelados que contemplaría el acercamiento. Aunque dichas medidas estarán destinadas a la generalidad de terroristas (yihadistas, GRAPO e incluso miembros del crimen organizado) todas las miradas se han puesto en los presos de ETA.

En la actualidad, hay 643 presos de ETA y su entorno —según los datos del boletín de marzo de la asociación Etxerat, el colectivo de los "Presos políticos Vascos", ya que la Secretaria de Instituciones Penitenciarias, dependiente del Ministerio del Interior, se ha negado a dar los datos oficiales a 20minutos.es—  que cumplen penas en prisiones de dentro y fuera de España.

Del número anteriormente citado, 496 cumplen condenas en territorio español (más otros once que están en prisión atenuada en sus domicilios) y aproximadamente la veintena de presos que se han arrepentido y cumplen condena en el penal alavés de Nanclares de la Oca y que Etxerat no contabiliza.

De los otros presos que se podrían acoger al nuevo plan del Ejecutivo estarían 38 de GRAPO, unos 55 islamistas y unos 400 relacionados con el crimen organizado, según publican diversos medios de comunicación, aunque este última cifra es un poco ambigua. Esto sumaría un total de unos 1.000 presos que entrarían, en teoría, dentro de las posiblidades de las nuevas medidas.

Otros 138 etarras están encarcelados en Francia y otros cuatro se encuentran en prisiones de Portugal, Irlanda del Norte, Inglaterra y México.

Esos casi quinientos reclusos se encuentran encarcelados en 50 prisiones del territorio nacional. En las tres cárceles del País Vasco (Basauri, Martutene y Zaballa) cumplen condena seis de ellos y en Pamplona (Navarra) otro.

De ellos, 61 son mujeres, de las cuales 5 de ellas cumplen condena con un hijo.

El centro penitenciario con una población etarra más numerosa es el de Zuera, en Zaragoza, que cuenta con 24. El resto de prisiones con presencia de ETA son A Lama (Pontevedra), Alcalá Meco (Madrid), Algeciras, Almería, Aranjuez (Madrid), Badajoz, Bonxe (Lugo); Brieva (Ávila), Burgos, Cáceres II, Castellón I y II, Córdoba, A Coruña, Daroca (Zaragoza), Dueñas (Palencia), El Dueso (Cantabria), Estremera (Madrid), Foncalent (Alicante), Granada, Herrera de La Mancha (Ciudad Real), Nanclares de la Oca (Álava), Huelva II, Jaén II, Logroño, Málaga, Mansilla (León), Monterroso (Lugo), Murcia I y II, Navalcarnero (Madrid), Ocaña I y II (Toledo), Puerto I, II y III (Cádiz), Sevilla II, Soria, Soto del Real (Madrid), Teruel, Topas (Salamanca), Valdemoro (Madrid), Valencia II y III, Valladolid, Villabona (Asturias) y Villena (Alicante).

Según datos de octubre del año 2011, 121 presos se encontraban presos de manera provisional (a la espera de que se celebre su juicio). Según los datos de Etxerat el número de reclusos en prisión provisional, a mes de marzo de 2012, es de 16.

En octubre de 2011 —con 559 reclusos de ETA—, 377 de ellos se encontraban en régimen cerrado (aislados en una celda de la que pueden salir cinco horas al día), 181 estaban en segundo grado (pueden obtener beneficios peninteciarios y disfrutarlos) y 3 estaban en tercer grado (semilibertad, pueden salir del centro durante el día para trabajar o estudiar y vuelven para dormir).

Nanclares de la Oca (en Álava) fue el centro elegido por el anterior Ejecutivo para reagrupar y dar beneficios penitenciarios a los presos etarras que decidieron pedir perdón por sus hechos y desvincularse de la banda terrorista. Es precisamente esa 'vía Nanclares' la que parece que legitima este nuevo plan anunciado por el Ministerio del Interior.