El vicepresidente de la CEOE, Arturo Fernández, ha calificado la última reforma laboral de "la más profunda de la democracia", niega que esté hecha a la medida del empresariado, y ha defendido que con ella ganan "trabajadores y empresarios, gana España", según ha afirmado este lunes en una entrevista a RNE.

"Los empresarios empezaremos a poder contratar, siempre que las condiciones de financiación y otras medidas necesarias se pongan en marcha", ha explicado Fernández, para quién esta norma "abre la puerta a que el desempleo -que afecta a 5,3 millones de españoles- pueda decrecer".

En la CEOE no descartan que la nueva norma pueda producir ciertas "arbitrariedades", pero descartan que esa sea la principal consecuencia de la reforma. "Empresarios, los habrá más justos o menos justos, pero no somos los malos. Emplearemos (la reforma) pensando en contratar, nunca en despedir", ha dicho Fernández.

Lo principal para el vicepresidente de los empresarios es que esta nueva legislación laboral "imita al resto de países de Europa y en concreto a los países má avanzados" otorgando flexibilidad al empresario.

El presidente de la patronal, Juan Rosell, tiene previsto reunirse este lunes con la ministra de empleo Fátima Báñez para agradecerle la reforma. La patronal lleva todo el fin de semana en contacto telefónico con Báñez, para conocer el alcance del nuevo decreto ley, según ha explicado el vicepresidente de la CEOE. "Este gobierno ha tomado el toro por los cuernos y se ha dado cuenta de que no estamos para reformitas sino para reformas de verdad", ha concluido.

Fernández niega que la reforma vaya a suponer una precarización del empleo. Ha puesto como ejemplo la contratación de jóvenes, cobrando el 25% del paro. "Es importantísimo. Con un 30% de paro, la facilidad de contratar no tiene por qué ser precaria. Ahora los jóvenes tiene un año de contrato y si funcionan en la empresa, se quedarán con un contrato de 33 días y 24 meses. Eso es acercarnos a Europa".

La posibilidad de rebajar los sueldos de los empresarios ayudará a cerrar menos empresas, en opinión de Arturo Fernández. "Si a una empresa no le va bien y no puede bajar los salarios, no puede despedir a uno o a dos, lo que tiene que hacer es cerrar la empresa. Con esta reforma vamos a poder flexibilizar a nuestras plantillas, contratar más fácilmente y eso bueno para el trabajador".