Pesa poco más de 61 kilos. "Está fino", como se dice en el argot. En 2010, a petición del Comité Olímpico Italiano, fue castigado por el TAS con dos años de sanción por la similitud de su ADN con el de una de las bolsas de sangre incautadas en 2006 durante la operación Puerto. Ahora vuelve.

Físicamente está degaldo. No ha sido un año y medio ocioso...
Me he entrenado mucho, salidas largas e intensas. ¡No podía hacer otra cosa! Sumaré entre 25.000 y 26.000 km... No es lo mismo que competir.

Los cicloturistas agradecen que deje de calentar las rutas...

Algunos tenían ganas de que pudiera correr para poder descansar un poco (ríe)... Lo hemos pasado muy bien, sí.

¿La lección de todo este parón?

He aprendido lo que es la vida normal de una persona a través de cosas que no podía hacer entre tanto viaje, como disfrutar de la familia, de los amigos... He estado tanto tiempo en casa que lo voy a echar de menos; pero amo el ciclismo. Es duro no hacer tu trabajo, pero es gratificante poder disfrutar de la familia.

¿Le preocupa que le señalen?

En absoluto. Ya he cumplido con lo que ellos [en referencia a la Unión Ciclista Internacional] querían, con la sanción. Siempre dije lo que pensaba y no quiero darle más vueltas. Ahora tengo la oportunidad de volver a lo más alto.

¿Ha llegado a sentir rencor?

El rencor es malo. El daño está hecho y darle más vueltas al asunto es peor. Joder, pues sí que jode.

La UCI impidió su presentación en diciembre por la sanción en vigor. ¿Se sintió perseguido?

Cuestión de reglamento. No hay que darle más vueltas...

Pero también han seguido con lupa sus apariciones públicas...

Invitaciones. En este tiempo nunca me inscribí en una marcha, nunca me puse un dorsal ni salgo en una clasificación. No he hecho nada que no se pueda hacer.

Tuvo ofertas, Movistar aparte...

Tengo 31 años y no sé si me hubiera sentado bien el cambio. Hay que ser agradecido y éste es el mismo grupo humano que tan bien me trató.

¿Ha seguido la actualidad?

He visto el ciclismo por la tele y he aprendido cosas, detalles que sólo se ven desde fuera.

BIO Murciano (1980). Más de 65 triunfos (le quitaron varios de 2010): la Vuelta (2009), dos Lieja-Bastogne-Lieja (2006 y 2008).

En los últimos días de 2011 se confirmó su fichaje por el Movistar. El ganador de la pasada Vuelta no ha podido disfrutar de ese éxito por la desaparición de su anterior equipo, el Geox, con el que renovó.

¿Cómo ha vivido estos tres meses sin un futuro laboral claro?

Con mucha incertidumbre. Con todo el subidón de ganar la Vuelta lo que menos te esperas es vivir esto... Sí es cierto que ese triunfo era una garantía. Eusebio Unzué [director] me transmitió tranquilidad.

¿Y ha perdido mucho caché?

Lo económico ha variado desde la Vuelta. Una vez que Geox no seguía tenía que buscar el mejor acomodo, sobre todo en lo deportivo. Y Movistar, que lo es, hizo un gran esfuerzo.

Ya estuvo en esta estructura, aunque como Caisse d'Epargene. No fue su mejor temporada...

Ahora vengo con otra mentalidad. ¡Soy mucho más optimista que en 2010! Tenemos que sacarnos esa espina clavada.

En 2012 irá al Tour y la Vuelta...

¡Será la primera vez que corra dos grandes el mismo año!

Defender su título no será fácil...

El año pasado se vio que los más fuertes de la Vuelta fuimos ciclistas sin ningún tipo de carga al comienzo de temporada. Y así queremos comenzar.

Uno de los siete finales en alto de la Vuelta, Cuitu Negro (Asturias), tiene rampas del 25%...

Para el ciclismo es bueno. Aporta vistosidad y genera más afición. Para los ciclistas, no.

¿Se ha dado algún capricho?

No. Y por falta de tiempo. Es increíble lo que conlleva ganar una Vuelta. ¡Sigo con el Camino de Santiago a medio hacer!

BIO Cántabro. Nació en 1981. El bisonte de La Pesa, por su barrio de Cabezón de la Sal. ganó en 2011 la Vuelta tras vestirse de líder en el Angliru.