El Real Madrid saltó al terreno de juego sabiendo que una victoria le situaba por delante de Valencia y Osasuna en su pugna por el subcampeonato de Liga, lo que no fue óbice para que el técnico López Caro dejara en el banquillo a Zidane y Cicinho.
Si trascendente era el partido para los blancos, más aún lo era para el Racing, que tras la victoria del miércoles del Alavés, tan sólo estaba a un punto de los puestos de descenso.
Nando Yosu, dispuesto a hacer crecer su leyenda de talismán con el que el Racing evita el descenso cuando vienen mal dadas, presentó la alineación esperada, con la consigna de presionar al Madrid en su línea de creación.
Cuando sólo se habían jugado seis minutos el Racing ya tenía a sus dos centrales, Moratón y Oriol, amonestados con tarjetas amarillas.
El Real Madrid daba su primer aviso con un saque de falta de Pablo García que salió ligeramente desviado. El Real Madrid no pisaba el área del Racing. Raúl y Soldado no superaban la defensa cántabra.
Así, las mejores opciones de los blancos llegaban en jugadas de estrategia, como la citada del uruguayo, o la que sacó Beckham para que Sergio Ramos rematara de cabeza, por alto.
La situación se le complicaba al Racing que, para colmo de males, perdía a Casquero al lesionarse en la rodilla derecha cuando sacó una falta desde unos 25 metros, que se fue muy desviada.
Con el marcador a su favor el Madrid se dedicó a dormir el balón cuando lo tenía en su poder, replegándose en bloque en cuanto perdían la posesión.
Enfrente, el Racing, aunque ponía ganas, mostraba pocos recursos y no daba la impresión de poder dar la vuelta al partido.
El Real Madrid acabó con las exiguas esperanzas del Racing en una internada en velocidad de Roberto Carlos, que abortó Dudú Aouate, pero el israelí no controló el esférico. Raúl estuvo listo y sirvió un balón de oro para que Soldado marcara, rematando junto al poste.
Cuando López Caro movió el banquillo dando entrada a Zidane por Soldado, la afición cántabra recibió al francés con muchos aplausos, conscientes de la inminente adiós del centrocampista.
Apenas un minutos después el Real Madrid aumentaba su ventaja, con un pase de Guti a Robinho, quien marcó desde la frontal del área, ajustando el balón a la base del poste.
Juego para los cántabros
Después de que Antoñito desperdiciara un claro contragolpe, el Racing anotó un pírrico tanto, en un saque de esquina rematado por Matabuena.
Entonces fue cuando mejor jugaron los cántabros, pero ni Melo ni Juanjo aprovecharon sus respectivas ocasiones.
Con el tiempo cumplido el Racing se situó a un gol al marcar de nuevo Matabuna en una jugada embarullada. Pero, en los tres minutos de tiempo añadido, no pudo completar la remontada ante un Real Madrid que pedía la hora.
NOTICIAS RELACIONADAS:
- El Barça, campeón de Liga
Comentarios
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que 20minutos.es restringirá la posibilidad de dejar comentarios